
La gestora de fondos de inversión Amundi ha lanzado en su último informe algunas de las grandes tendencias que van a cambiarlo todo en los próximos años y que los inversores debemos conocer para posicionarnos en las ideas de inversión que nos harán ganar a largo plazo.
En este ciclo de artículos dónde analizamos las principales megatendencias del momento, ahora vamos a mirar hacía lo que puede separarnos del futuro.
La Inteligencia Artificial y la Transición Climática como Motores de Cambio a Corto Plazo: Amundi identifica la IA como un catalizador clave para el aumento de la productividad y las políticas climáticas como un factor que podría reducir costes en la próxima década. Estos dos elementos configurarán una nueva dinámica de crecimiento e inflación, ofreciendo oportunidades, aunque no sin enfrentar vientos en contra como la redefinición de las rutas comerciales globales y los persistentes problemas demográficos y de deuda.
El Resurgimiento de la Renta Fija y un Nuevo Foco Geográfico para la Renta Variable: Una de las conclusiones más firmes es que "los bonos han vuelto", señalando un cambio en su atractivo para las carteras. Simultáneamente, se anticipa una diversificación geográfica en la renta variable, con un menor protagonismo de EE. UU. y un mayor interés hacia los mercados europeos y asiáticos, lo que sugiere una reevaluación de la asignación regional de activos.
Desafíos Estructurales a Largo Plazo: Demografía y Costes Climáticos: Mirando más allá de la próxima década, Amundi advierte sobre dos frenos fundamentales para el crecimiento global a partir de 2040. El declive demográfico en muchas economías y el aumento de los costes materiales derivados del cambio climático impactarán negativamente el potencial de crecimiento económico a nivel mundial, un factor crucial para las estrategias de inversión a muy largo plazo.
Normalización de Activos Privados y su Rol Continuo en la Diversificación: Aunque se espera que los rendimientos extraordinarios vistos en algunos activos privados tienden a moderarse, Amundi sigue considerándolos una pieza fundamental para la diversificación de las carteras. Su capacidad para ofrecer retornos descorrelacionados o diferentes a los mercados públicos seguirá siendo valorada por los inversores estratégicos.
Europa ante una Oportunidad en un Mundo Fragmentado: En un entorno global caracterizado por un creciente nacionalismo y una mayor fragmentación geopolítica, Amundi vislumbra una ventana de oportunidad para que Europa refuerce su competitividad. Esto podría traducirse en un atractivo relativo para las inversiones en el continente si se gestionan adecuadamente los desafíos internos y se capitalizan las fortalezas regionales.