
En España circulan actualmente 34,1 millones de vehículos asegurados, de los cuales 24,8 millones corresponden a turismos y todoterrenos. Así lo reflejan los datos del primer trimestre de 2025 del Fichero Informativo de Vehículos Asegurados (FIVA), gestionado por el Consorcio de Compensación de Seguros. Los seguros de coche no solo son obligatorios para poder circular por las vías públicas del país, sino que también proporcionan protección financiera a los propietarios de los vehículos en caso de accidentes, daños a terceros y otras eventualidades.
En 2024, el precio medio de la póliza de seguro de coche experimentó un incremento interanual del 15%, situándose en 902 euros anuales, según el ‘Índice de precios del seguro de coche’ elaborado por el comparador online Kelisto.es. Este aumento supuso un sobrecoste medio de 117 euros respecto a 2023. Una tendencia alcista que se ha mantenido en los primeros meses de 2025. Durante el primer trimestre del año, la prima media aumentó hasta los 965,16 euros, lo que representa un incremento del 14% respecto al último trimestre de 2024. Este repunte se atribuye a factores como el aumento de la siniestralidad en las carreteras y los costes de reparación, y el impacto de la inflación.
Aunque el precio del seguro de coche ha aumentado, no todos los conductores pagan lo mismo. Las compañías aseguradoras, como Qualitas Auto, tienen en cuenta muchos factores a la hora de calcular el importe de la prima, ya sea que los conductores contraten seguros de coche online o renueven pólizas existentes. Estos son algunos de los principales factores que influyen en el coste del seguro de coche.
Edad del conductor
La edad del conductor influye considerablemente en el precio de la prima del seguro de coche. Los conductores jóvenes, especialmente aquellos entre 18 y 24 años, suelen pagar primas más elevadas debido a que, estadísticamente, tienen mayor riesgo de conducir de forma imprudente y de verse involucrados en accidentes. A partir de los 25 años, el coste del seguro tiende a disminuir y se mantiene relativamente estable, especialmente en edades intermedias, es decir, entre los 30 y los 60 años. Sin embargo, las primas, incluso de los mejores seguros de coche, suelen aumentar nuevamente al acercarse a los 70 años, debido a la posible disminución de las capacidades cognitivas y del tiempo de reacción en los conductores de mayor edad.
Antigüedad del carnet de conducir
Otro factor importante que influye en el precio de la prima del seguro de coche es la antigüedad del carnet de conducir. Por lo general, cuantos más años lleve un conductor el carnet de conducir, menor es el riesgo percibido por las aseguradoras, lo que se traduce en primas más bajas.
Historial de conducción
Las compañías de seguros consideran el historial de conducción como un factor clave al calcular la prima de una póliza de coche. Este historial refleja el comportamiento del conductor al volante y permite estimar la probabilidad de que se produzcan siniestros futuros. Por este motivo, los conductores con antecedentes de accidentes en los que fueron responsables o con múltiples infracciones de tráfico suelen enfrentarse a primas más elevadas, ya que representan un mayor riesgo para la aseguradora. En cambio, aquellos con un historial limpio pueden beneficiarse de primas más bajas.
Lugar en el que vive el conductor
La zona en la que reside y conduce habitualmente el conductor influye en el precio del seguro de coche. Si vive en una zona urbana, generalmente el precio se encarecerá debido a una mayor probabilidad de sufrir un accidente. Además, si reside en una zona con altos índices de delincuencia y en la que se han registrado robos de vehículos, es probable que el coste del seguro de coche sea mayor.
Modelo y potencia del coche
Más allá de los factores relacionados con el conductor, hay una serie de aspectos que tienen que ver con las características del coche que también influyen en el precio final del seguro. Entre ellos se encuentran el modelo y la potencia del vehículo. Un coche de alta gama o con un motor potente tiene un precio considerablemente más alto por reparación y sustitución, lo que conlleva una prima de seguro más alta. Este tipo de coche también puede circular a altas velocidades, lo que aumenta el riesgo de sufrir un accidente.