El Consejo de Ministros ha impuesto determinadas condiciones a la operación de compra de San Miguel por la cervecera madrileña Mahou. El objetivo es prevenir la conformación de una estructura de mercado que implique serias restricciones de la competencia efectiva en la comercialización de cerveza en general y, muy especialmente, en el mercado Horeca (hostelería, restauración y catering).
Tras el dictamen emitido por el Tribunal de Defensa de la Competencia contrario a la compra del 70 por ciento de San Miguel por parte Mahou, que ya disponía del 30 por ciento restante, el Ejecutivo ha subordinado a determinadas condiciones la operación de concentración.
Una de las condiciones impuestas por el Gobierno es que en el plazo de tres meses desde la notificación del presente acuerdo, el grupo Mahou-San Miguel deberá eliminar toda condición de exclusividad de los contratos o acuerdos que mantenga con los concesionarios o distribuidores del mercado de la comercialización de cerveza a través del canal Horeca.
Asimismo, no realizará ningún nuevo contrato con concesionarios o distribuidores de sus productos que contenga cláusulas de exclusividad. El plazo de duración de esta condición será de cinco años desde la notificación del presente Acuerdo. Además, antes de tres meses desde la notificación del presente acuerdo, el grupo Mahou-San Miguel deberá rescindir los acuerdos de licencias de producción o de distribución de marcas que mantenga con terceros, excepto los referentes a la marca 'Carlsberg'.

CERVECERAS
Aprobada con condiciones la absorción de San Miguel por Mahou
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