L. D. / EP.- El banco originado de la fusión de Open Bank con el portal financiero Patagon inició en diciembre del año pasado una prueba piloto en Zaragoza con la apertura de una sucursal. En la actualidad cuenta además con otras oficinas en Madrid, Barcelona, Las Palmas y Pamplona.
Según fuentes de la entidad, los establecimientos en Zaragoza, donde también ha abierto dos “stands” en sendos centros comerciales, han permitido hacer desde diciembre el mismo negocio conseguido en la localidad en cuatro años a través de la banca telefónica e Internet. Para la entidad, la estrategia de apertura de oficinas y de “stands” posibilita dar un impulso comercial a sus productos y servicios y da respuesta a clientes que se sienten más seguros con una sucursal cerca.
Sin embargo, el banco no planea una apertura agresiva de establecimientos sino acompasar las inauguraciones a los resultados, con los que quiere alcanzar el punto de equilibrio a finales de 2002 o principios de 2003. Patagon registró en el primer trimestre del año unas pérdidas netas de 559 millones de pesetas, lo que representa una mejora del 43,47 por ciento sobre las registradas en el mismo periodo por Open Bank.
Las mismas fuentes subrayaron que el modelo adoptado para la red es de bajo coste. Así, algunas sucursales como la de Zaragoza se establecen en régimen de alquiler y el banco comparte otras oficinas con la financiera del grupo BSCH Hispamer, como las abiertas en Pamplona (Navarra), Las Palmas y una de las dos que tiene en Madrid.
En paralelo a las sucursales y apoyándose en las mismas, Patagon tiene abiertos “stands” en lugares estratégicos como centros comerciales, aeropuertos, metro o estaciones de tren de 20 ciudades, con una media de 20 puntos de atención por ciudad. Según el banco, los “stands”, captan en la actualidad uno de cada cinco clientes nuevos del banco y están atendidos en su mayor parte por comerciales contratados de manera temporal.
Según fuentes de la entidad, los establecimientos en Zaragoza, donde también ha abierto dos “stands” en sendos centros comerciales, han permitido hacer desde diciembre el mismo negocio conseguido en la localidad en cuatro años a través de la banca telefónica e Internet. Para la entidad, la estrategia de apertura de oficinas y de “stands” posibilita dar un impulso comercial a sus productos y servicios y da respuesta a clientes que se sienten más seguros con una sucursal cerca.
Sin embargo, el banco no planea una apertura agresiva de establecimientos sino acompasar las inauguraciones a los resultados, con los que quiere alcanzar el punto de equilibrio a finales de 2002 o principios de 2003. Patagon registró en el primer trimestre del año unas pérdidas netas de 559 millones de pesetas, lo que representa una mejora del 43,47 por ciento sobre las registradas en el mismo periodo por Open Bank.
Las mismas fuentes subrayaron que el modelo adoptado para la red es de bajo coste. Así, algunas sucursales como la de Zaragoza se establecen en régimen de alquiler y el banco comparte otras oficinas con la financiera del grupo BSCH Hispamer, como las abiertas en Pamplona (Navarra), Las Palmas y una de las dos que tiene en Madrid.
En paralelo a las sucursales y apoyándose en las mismas, Patagon tiene abiertos “stands” en lugares estratégicos como centros comerciales, aeropuertos, metro o estaciones de tren de 20 ciudades, con una media de 20 puntos de atención por ciudad. Según el banco, los “stands”, captan en la actualidad uno de cada cinco clientes nuevos del banco y están atendidos en su mayor parte por comerciales contratados de manera temporal.