L D (EFE) El abogado de Lay, Earl Silbert, ha aconsejado a su defendido que no declara ante ninguno de los comités del Congreso ante la proliferación de comentarios agresivos entre muchos congresistas. Según expone Silbert en una carta enviada a la Cámara de Representantes, "no se puede esperar que Lay participe en un procedimiento en el que se han alcanzado conclusiones antes de dársele una oportunidad de ser escuchado".
.
La espantada del ex presidente de Enron deja en el limbo la utilidad real de las audiencias de este lunes, y también las que celebrarán en las próximas semanas. La presencia de Lay había generado una expectación inusitada en el Capitolio, y tres cadenas de televisión generalistas y cuatro canales por cable tenían previsto ofrecer en directo su testimonio.
A partir de ahora, los congresistas tienen a su disposición un instrumento legal: la citación judicial, pero ello puede forzar a Lay a acogerse a la Quinta Enmienda de la Constitución, que permite a una persona no ofrecer testimonio si puede incriminarle. Eso mismo hizo, hace dos semanas, David Duncan, el despedido ejecutivo de Arthur Andersen que dirigía la supervisión de la contabilidad de Enron.
Las posibilidades de que los directivos de Enron, quienes cada vez afrontan más acusaciones y la ira generalizada del país, expliquen en público qué hundió a la gigantesca empresa energética de Houston (Texas) se reducen.
Todos los derechos reservados
!-->