L D (EP) Estos son algunos de los argumentos en los que la entidad basará su defensa, tras la decisión de la Audiencia Nacional de imputar a dos empleados de la oficina de Majadahonda. Para "La Caixa", la prueba de que no ha ayudado a encubrir dinero de Gescartera es que todas las operaciones de sus cuentas, tanto ingresos como reintegros, han sido registradas y teleprocesadas a través de sus sistemas informáticos, con lo que conserva los documentos justificativos de las mismas.
A este respecto, la entidad aseguró que no ha incumplido las normas sobre prevención del blanqueo de capitales, que le eximen de notificar ninguna de sus operaciones a la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales (CPBC) al ser Gescartera, además de un cliente habitual -su principal cliente-, una sociedad "perfectamente identificada, con actividad conocida, regulada, auditada y controlada por la CNMV".
A esto hay que añadir que las operaciones realizadas por Gescartera siempre fueron ordenadas expresamente por apoderados de la compañía, tanto en los abonos como en los reintegros. Fuentes de "La Caixa" indicaron que los ingresos en metálico realizados en las cuentas de Gescartera en su oficina de Majadahonda no son representativos de la actividad que este cliente ha mantenido con la entidad. En concreto, la oficina de Majadahonda sólo ingresó en metálico 115 millones de pesetas.
"La Caixa" insistió en el hecho de que todos los ingresos realizados, y que fueron llevados a cabo por el chófer de Antonio Camacho, propietario de la agencia de valores, se realizaron mediante órdenes firmadas por apoderados de Gescartera.
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A este respecto, la entidad aseguró que no ha incumplido las normas sobre prevención del blanqueo de capitales, que le eximen de notificar ninguna de sus operaciones a la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales (CPBC) al ser Gescartera, además de un cliente habitual -su principal cliente-, una sociedad "perfectamente identificada, con actividad conocida, regulada, auditada y controlada por la CNMV".
A esto hay que añadir que las operaciones realizadas por Gescartera siempre fueron ordenadas expresamente por apoderados de la compañía, tanto en los abonos como en los reintegros. Fuentes de "La Caixa" indicaron que los ingresos en metálico realizados en las cuentas de Gescartera en su oficina de Majadahonda no son representativos de la actividad que este cliente ha mantenido con la entidad. En concreto, la oficina de Majadahonda sólo ingresó en metálico 115 millones de pesetas.
"La Caixa" insistió en el hecho de que todos los ingresos realizados, y que fueron llevados a cabo por el chófer de Antonio Camacho, propietario de la agencia de valores, se realizaron mediante órdenes firmadas por apoderados de Gescartera.
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