L D (Agencias) El desplome de las acciones de Vivendi se debe a las revelaciones periodísticas de que hubo un intento de maquillar las cuentas del grupo el pasado otoño, con la ayuda de sus gabinetes de auditores, incluido Arthur Andersen (ya implicado en el escándalo de Enron), y que esa operación fue frustrada por la Comisión francesa de Operaciones de Bolsa (COB). Asimismo, la rebaja, por parte de la agencia Moody's, de la calificación de su deuda a largo plazo al rango de "bonos basura" fue determinante para la caída de sus títulos.
Hay que tener en cuenta que esta rebaja dificultará tremendamente la capacidad del endeudado grupo de obtener nuevas financiaciones y, sumado a la gran incertidumbre sobre el futuro de Vivendi Universal los inversores han huido de sus títulos. El grupo tuvo unas perdidas récord de 13.600 millones de euros en 2001 y cuya deuda, incluida la de su filial de agua, ronda los 35.000 millones de euros.
Poco después de las 13.30 locales, el título de VU caía un 15,28 por ciento a 15,08 euros, después de hacer perdido más de un 25 por ciento ayer. En lo que va de año, ha caído un 75 por ciento, en un mercado financiero en bajada global del 2,12 por ciento, frente al retroceso del 4,15 por ciento de este martes. Los mercados financieros siguen desconfiando de la evolución de Vivendi Universal, pese a que a la renuncia al cargo de su presidente, Jean-Marie Messier. A cambio de irse, Messier habría obtenido una indemnización de unos 18 millones de dólares (unos 19,7 millones de euros), es decir tres veces su salario en 2001, según publica este miércoles el "Wall Street Journal". El Consejo de administración de Vivendi celebrará esta tarde una sesión extraordinaria para ratificar la marcha de Messier y nombrar a su sucesor. El favorito a la sucesión es el vicepresidente del consejo de vigilancia del grupo farmacéutico Aventis, Jean-René Fourtou.
Hay que tener en cuenta que esta rebaja dificultará tremendamente la capacidad del endeudado grupo de obtener nuevas financiaciones y, sumado a la gran incertidumbre sobre el futuro de Vivendi Universal los inversores han huido de sus títulos. El grupo tuvo unas perdidas récord de 13.600 millones de euros en 2001 y cuya deuda, incluida la de su filial de agua, ronda los 35.000 millones de euros.
Poco después de las 13.30 locales, el título de VU caía un 15,28 por ciento a 15,08 euros, después de hacer perdido más de un 25 por ciento ayer. En lo que va de año, ha caído un 75 por ciento, en un mercado financiero en bajada global del 2,12 por ciento, frente al retroceso del 4,15 por ciento de este martes. Los mercados financieros siguen desconfiando de la evolución de Vivendi Universal, pese a que a la renuncia al cargo de su presidente, Jean-Marie Messier. A cambio de irse, Messier habría obtenido una indemnización de unos 18 millones de dólares (unos 19,7 millones de euros), es decir tres veces su salario en 2001, según publica este miércoles el "Wall Street Journal". El Consejo de administración de Vivendi celebrará esta tarde una sesión extraordinaria para ratificar la marcha de Messier y nombrar a su sucesor. El favorito a la sucesión es el vicepresidente del consejo de vigilancia del grupo farmacéutico Aventis, Jean-René Fourtou.