LD (EFE) Conforme a esta medida, que amplía el plan de reestructuración anunciado por el grupo en junio pasado sobre el recorte de 10.000 empleos, Alcatel pasará a tener 60.000 trabajadores a finales de 2003, frente a los 83.000 con que contaba a 30 de junio pasado. Según ha anunciado Alcatel en un comunicado, en estos 60.000 empleos se incluirá la fuerza adicional de trabajo en su filial Shangai Bell, en proceso de consolidación, y también los 10.000 despidos anunciados en junio pasado.
Alcatel, presente en más de 130 países, justificó esta nueva suspensión de empleos en el deterioro del mercado de las telecomunicaciones y en su compromiso de retornar a la rentabilidad en 2003, después de que en el primer semestre del año registrara unas pérdidas netas de 2.274 millones de euros. El objetivo de Alcatel es alcanzar un punto muerto en el cuatro trimestre de 2002 próximo a los 3.000 millones de euros, lo que representa un ritmo anual de 12.00 millones. Según Alcatel, este monto es inferior en más de un 25 por ciento al nivel actual de actividad y también a sus previsiones de actividad para el año próximo.
Para la segunda mitad de este año, Alcatel espera un volumen de negocios un 10 por ciento inferior al de los primeros seis meses, a parámetros constantes, con un "débil" tercer trimestre y un cuarto trimestre más fuerte como es tradicional. El fabricante consideró que en el tercer trimestre podría registrar un 15 por ciento menos de ventas que en abril-junio, pero con un impacto limitado en el resultado de explotación, debido a una reducción de los gastos fijos más rápida de lo previsto.
Alcatel, que aseguró que sigue aumentado su parte de mercado a nivel mundial en varios segmentos de actividad, informó de que sus actuales compromisos financieros están cubiertos sin venta de activos. El grupo mantiene su objetivo de endeudamiento neto a finales de este año inferior al de 2001, "teniendo en cuenta durante la segunda parte del año el deterioro de la situación financiera de algunos de sus clientes".
Alcatel, presente en más de 130 países, justificó esta nueva suspensión de empleos en el deterioro del mercado de las telecomunicaciones y en su compromiso de retornar a la rentabilidad en 2003, después de que en el primer semestre del año registrara unas pérdidas netas de 2.274 millones de euros. El objetivo de Alcatel es alcanzar un punto muerto en el cuatro trimestre de 2002 próximo a los 3.000 millones de euros, lo que representa un ritmo anual de 12.00 millones. Según Alcatel, este monto es inferior en más de un 25 por ciento al nivel actual de actividad y también a sus previsiones de actividad para el año próximo.
Para la segunda mitad de este año, Alcatel espera un volumen de negocios un 10 por ciento inferior al de los primeros seis meses, a parámetros constantes, con un "débil" tercer trimestre y un cuarto trimestre más fuerte como es tradicional. El fabricante consideró que en el tercer trimestre podría registrar un 15 por ciento menos de ventas que en abril-junio, pero con un impacto limitado en el resultado de explotación, debido a una reducción de los gastos fijos más rápida de lo previsto.
Alcatel, que aseguró que sigue aumentado su parte de mercado a nivel mundial en varios segmentos de actividad, informó de que sus actuales compromisos financieros están cubiertos sin venta de activos. El grupo mantiene su objetivo de endeudamiento neto a finales de este año inferior al de 2001, "teniendo en cuenta durante la segunda parte del año el deterioro de la situación financiera de algunos de sus clientes".