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El dilema de los bancos centrales: liquidez vs solvencia

Tras tres años del estallido de la crisis financiera, los Bancos Centrales de EEUU y Europa han pasado de neutralizar la iliquidez de sus Sistemas Financieros a refinanciar sus activos tóxicos latentes. Esta situación plantea varios interrogantes.

Jose2010 dijo el día 21 de Diciembre de 2010 a las 10:36:

Todo viene por privar o "expropiar" al individuo de su libertad económica. Uno no puede planificar su vida adecuadamente para conseguir sus fines si se le limita en este sentido. Y como vemos además tiene consecuencias nefastas para la vida en sociedad.

El Estado no debería hacerse cargo de asuntos económicos, simplemente limitarse a defender al individuo de ataques de otros. Cada uno debería elegir pagar los servicios que le ofrezcan los demás, sean públicos o privados, como forma de democracia, para indicar si está de acuerdo o no con ellos. En el momento que se le impide y otros toman la decisión por él, la consecuencia es que en vez de coordinarse la sociedad, ésta se destruye. Hasta que no nos demos todos cuenta de esto y queramos cambiarlo tenemos un negro futuro por delante.

El Estado no está para solucionarnos todos los problemas, incluidos los económicos. Por mucho que lo prometan los políticos esto es una imposibilidad científica.

Yo por mi parte tengo claro que esto no lo cambia ningún partido intervencionista (PSOE, PP, IU, etc). Esto solo lo cambiaría un partido realmente liberal. Lamentablemente no conozco a ninguno en España.

et_rusk dijo el día 20 de Diciembre de 2010 a las 12:32:

Perdonar pero son recomendaciones de otro economista-astrologo.

_http://etrusk.blogspot.com/2009/05/economistas-astrologos.html

HispanoL dijo el día 20 de Diciembre de 2010 a las 12:17:

El problema de fondo, el fundamental, es que al estar desvinculadas las monedas del oro, no se pueden fijar tipos de interés objetivos. Si la moneda fuese el oro y el sistema bancario fuese libre, los tipos de interés serían objetivamente fijados por los agentes económicos, es decir, por el mercado.