Me parece que el silencio de Rajoy, ya sea por esperar a las elecciones andaluzas, ya sea por esperar a que su acción de gobierno nos lo anuncie Bruselas, revela que los complejos siguen gozando de mayoría absoluta en el seno del Partido Popular.
Guillermo Dupuy
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gracian dijo el día 25 de Noviembre de 2011 a las 14:27:
Lo de no concretar medidas hasta no conocer exactamente el balance de situación no sirve de excusa en ningún caso porque existe un consenso básico sobre el estado comatoso de la economía, las causas que lo han originado y los remedios que urge aplicar y nada de ello se va a alterar de modo sustancial por el ajuste definitivo de los números.
La receta a aplicar será la misma en cualquier caso. Y lo urgente con Zeta y ahora es darle el bebedizo al paciente antes de que se nos quede pajarito. Si se lo damos cuando ya esté pajarito, seguirá pajarito. Pero eso sí, gracias a la prudencia Rajoyesca sabremos con exactitud matemática todos los guarismos que le han causado el exitus.
Quizá sea interesante ese dato para el progreso de la ciencia económica, pero es ineficaz en términos políticos que es de lo que se trata.
Lo que se trasluce de todo ello es que no hay intención de aplicar al enfermo un tratamiento de choque ni nada que se le parezca y mejor olvidarse desde ya del invierno de nuestro descontento que dice Emilio González, porque tampoco se percibe ni asomo de intención de acometer ofensiva ideológica alguna.
Y esto no son los complejos don Guillermo. Es el centro reformismo sin ambages. Y se aplica así. Lo llevamos viendo 4 años en marcha como para ahora sorprendernos.
Lo de no concretar medidas hasta no conocer exactamente el balance de situación no sirve de excusa en ningún caso porque existe un consenso básico sobre el estado comatoso de la economía, las causas que lo han originado y los remedios que urge aplicar y nada de ello se va a alterar de modo sustancial por el ajuste definitivo de los números.
La receta a aplicar será la misma en cualquier caso. Y lo urgente con Zeta y ahora es darle el bebedizo al paciente antes de que se nos quede pajarito. Si se lo damos cuando ya esté pajarito, seguirá pajarito. Pero eso sí, gracias a la prudencia Rajoyesca sabremos con exactitud matemática todos los guarismos que le han causado el exitus.
Quizá sea interesante ese dato para el progreso de la ciencia económica, pero es ineficaz en términos políticos que es de lo que se trata.
Lo que se trasluce de todo ello es que no hay intención de aplicar al enfermo un tratamiento de choque ni nada que se le parezca y mejor olvidarse desde ya del invierno de nuestro descontento que dice Emilio González, porque tampoco se percibe ni asomo de intención de acometer ofensiva ideológica alguna.
Y esto no son los complejos don Guillermo. Es el centro reformismo sin ambages. Y se aplica así. Lo llevamos viendo 4 años en marcha como para ahora sorprendernos.