Un año. Ése es el tiempo que tiene el Gobierno para llevar a cabo las principales reformas. La Comisión Europea ha publicado este miércoles el documento con las recomendaciones al Consejo Europeo relativas al Plan Nacional de Reformas. Incluyen consejos sobre pensiones, impuestos, gasto público, reforma administrativa, etc. Prácticamente no hay nada que Bruselas (y los gobiernos de los socios comunitarios) no crea que es necesario cambiar, acelerar o profundizar.
Y todos estos cambios tendrán que venir en los próximos meses. El Ejecutivo comunitario ha decidido no lanzar un expediente sancionador contra España por desequilibrios excesivos, pero a cambio ha fijado un calendario acelerado para las reformas ya previstas por el Gobierno. De esta manera, antes de fin de año, Bruselas exige que se complete la reforma de las pensiones y, para marzo de 2014, quiere que esté en marcha una completa revisión del sistema fiscal. Es decir, en menos de un año, Mariano Rajoy tendrá que tener aprobadas y en funcionamiento estas medidas.
Reformas y recortes
Bruselas sigue preocupada por la estabilidad fiscal a medio plazo. Eso sí, su exigencia no se centra tanto en un recorte del déficit inmediato (de hecho, este miércoles también ha dado más plazo a España para llegar al 3%) sino en la consolidación en los próximos años. El plazo que se pone es 2018, aunque alerta de que para conseguirlo, sigue siendo necesario continuar con el esfuerzo fiscal. Y un apunte importante. Frente al debate habitual "austeridad" vs "crecimiento", basado sólo en el gasto público, recuerda:
"La corrección duradera de los desequilibrios presupuestarios se basa en la aplicación creíble de ambiciosas reformas estructurales que aumenten la capacidad de ajuste e impulsen el crecimiento potencial y el empleo".
Es una carga de profundidad en el argumentario del Gobierno. De hecho, a lo largo de todo el documento, las autoridades comunitarias exigen más reformas, profundizar en las ya hechas y cambiar algunas que no están funcionando. Todo ello con un lenguaje perentorio. Hay que hacer mucho y hacerlo ya.
En cuanto a los recortes de gasto propiamente dichos, podríamos dividir las recomendaciones de Bruselas en cinco puntos:
- Control presupuestario: la UE pide al Gobierno que garantice de forma "rigurosa y transparente" la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Para conseguirlo, exige que se establezca un "organismo presupuestario independiente antes del final de 2013". El Gobierno ya ha anunciado la creación de este órgano, pero será nombrado y controlado desde Hacienda, por lo que surgen dudas sobre su independencia real. En este sentido, Bruselas exige que se haga un "examen sistemático de las mayores partidas de gasto" antes de marzo de 2014
- Gasto en sanidad: en esta cuestión, la recomendación es "aumentar la relación coste-eficacia del sector sanitario". ¿Cómo? "Reduciendo el gasto farmacéutico de los hospitales, potenciando la coordinación y mejorando los incentivos a favor de un uso eficiente de los recursos".
- Morosidad pública: a pesar de los dos planes de pago a proveedores, en la UE siguen sin estar contentos con las cifras de morosidad pública. Por eso, exigen que se adopten "medidas para reducir los atrasos pendientes de la Administración" y que se evite de cualquier forma que vuelvan a acumularse facturas en los cajones"
- Desindexación: tras esta palabra tan poco atractiva se esconde uno de los grandes problemas de la economía española. Hay una gran cantidad de costes y precios que suben cada año de forma automática con el IPC. Bruselas quiere acabar con esto ya. El Gobierno ha anunciado una reforma en este sentido, pero la UE pide incluso "medidas adicionales de limitación de la aplicación" de estas cláusulas.
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Pensiones: la cuestión más polémica. No hay una petición concreta sobre las pensiones actuales, pero sí una exigencia directa sobre las futuras a corto plazo. En este sentido, lo que pide Bruselas es culminar antes de "final de 2013" la regulación del factor de sostenibilidad. Entre otras cosas, esto obligará a "que la edad de jubilación aumente en función del aumento de la esperanza de vida". Y no sólo. El montante de las prestaciones también tendrá que caer, para garantizar la sostenibilidad del sistema.
Impuestos
El segundo apartado de las recomendaciones hace referencia a los impuestos. Es apenas un párrafo, pero está lleno de contenido. Y no hará demasiada gracia a los contribuyentes españoles. La UE quiere más recaudación (algo lógico, al fin y al cabo, en cierto sentido son nuestros acreedores y nuestros avalistas). Y a corto plazo quiere conseguirlo con subidas de impuestos. De hecho, la exigencia va más allá y pide "una revisión sistemática del sistema tributario para marzo de 2014". Normalmente, estas palabras han significado subir impuestos al consumo (IVA o especiales) para relajar la presión sobre otros que penalizan la creación de riqueza, como IRPF o cotizaciones sociales. Pero en el documento de este 29 de mayo eso desaparece. Sólo quedan las peticiones para subir impuestos:
- Considerar una "mayor limitación del gasto fiscal relativo a la imposición directa": con esta frase, la UE parece apuntar hacia las múltiples deducciones del IRPF, que querría eliminar (planes de pensiones, vivienda,...)
- "Mayor limitación de la aplicación de los tipos de IVA reducidos".
- "Medidas adicionales en lo que respecta a los impuestos medioambientales, sobre todo los impuestos sobre los carburantes".
- "Medidas adicionales para reducir el sesgo en favor del endeudamiento en el impuesto de sociedades".
- "Intensificar la lucha contra la economía informal y el trabajo no declarado".
Mercado laboral
En Bruselas creen que es necesario profundizar en la reforma laboral. Aunque en la primera parte del documento (la relativa a la evaluación de la coyuntura), se admite que los cambios normativos han mejorado "la flexibilidad interna de las empresas y la competitividad" de la economía española, la UE quiere más medidas. En este caso, hay dos aspectos en los que se centra: políticas de empleo (subsidio de paro, formación de los desempleados, etc.) y el paro juvenil.
Destaca la ausencia de referencias a la dualidad del mercado de trabajo español. Tras las declaraciones del comisario de hace unos días, en favor del contrato único, y las protestas airadas del Gobierno español. Este tema, un clásico en los informes comunitarios sobre España, se cae de la agenda.
- "Realizar rápidamente una reforma de las políticas activas del mercado de trabajo". ¿Esto qué significa? Orientar estas políticas a la "consecución de resultados" (lo que podría traducirse por unir estas políticas a la búsqueda de un empleo). Bruselas también pide "modernizar los servicios de empleo público" y acelerar la "colaboración público-privada" (con las ETT) ya en 2013.
- Lucha contra el desempleo juvenil: el mayor énfasis se pone en la formación. Bruselas cree que hay que reforzar el vínculo entre las aulas y el mercado de trabajo. Además, se marca como objetivo la reducción del "abandono escolar". La recomendación más concreta quizás se la petición de que se aplique "la formación profesional dual más allá de la actual fase piloto".
Las demás recomendaciones
El documento es muy prolijo en las peticiones para el Gobierno español. Los apartados más importantes son los expuestos arriba, pero en las apenas dos páginas de recomendaciones finales también aparecen otros muchos puntos que deberían ponerse en marcha en los próximos meses, puesto que el calendario que piden en Bruselas es muy exigente.
- Sector financiaro: "Llevar a cabo el programa del sector financiero para la recapitalización de las instituciones financieras, incluidas las medidas de fomento de la intermediación no bancaria adoptadas en noviembre de 2012". Éste es quizás el único punto en el que Bruselas se muestra conforme con lo hecho hasta ahora.
- Marginalidad y exclusión social: "Reforzar las políticas dirigidas al mercado de trabajo, con el fin de aumentar la empleabilidad de las personas con menor acceso". "Mejorar la eficiencia y la eficacia de las medidas de apoyo, incluidos servicios de ayuda de calidad a las familias".
- Unidad de mercado: "Aprobar y aplicar urgentemente el proyecto de Ley de Garantía de la Unidad de Mercado"
- Organismo regulador: "Garantizar la eficacia, autonomía e independencia de organismo regulador creado recientemente".
- Liberalización de los servicios: "Antes del final de 2013, aprobar y aplicar la Ley de Colegios y Servicios Profesionales".
- Menos burocracia: "Reducir el número de procedimientos de concesión de licencias y hacerlos más cortos". "Ampliar el uso del sistema de licencia rápida a actividades que no sean minoristas
- Ley Segunda oportunidad: "Examinar los marcos de insolvencia para las empresas y los particulares, entre otras maneras limitando la responsabilidad personal de los empresarios y facilitando las segundas oportunidades para las empresas que hayan quebrado".
- Liberalización del comercio: "Eliminar las restricciones injustificables al establecimiento de grandes locales minoristas; en marzo de 2014 a más tardar".
- Alquiler: "Examinar la eficacia del marco regulador respecto al apoyo al desarrollo del mercado del alquiler de viviendas".
- Mercado eléctrico: "Abordar el déficit de la tarifa eléctrica adoptando y aplicando una reforma estructural del sector de la electricidad antes del final de 2013".
- Infraestructuras: "Establecer una evaluación nacional independiente de los grandes proyectos de infraestructura futuros; adoptar medidas para garantizar la competencia efectiva en los servicios de transporte de mercancías y pasajeros por ferrocarril".
- Reforma de la administración: "Aprobar la reforma de la administración local y elaborar en octubre de 2013 a más tardar un plan de aumento de la eficiencia de toda la administración pública".
- Justicia: "Adoptar y aplicar las reformas en curso para aumentar la eficiencia del sistema judicial".