Con la crisis, el alquiler le ha ganado terreno a la vivienda en propiedad. De hecho, en el segundo trimestre del año, el precio de los arrendamientos en España subió de media un 1,5%, hasta los 6,88 euros por metro cuadrado al mes. Se trata del mayor ascenso de los precios desde el mismo periodo de 2007.
Pero el precio no es lo único negociable en un contrato de alquiler. De hecho, hay una larga lista de aspectos que hay que tener en cuenta antes de firmar. Cuando encuentras tu piso ideal, las prisas y el miedo a que otro posible inquilino se haga con la vivienda, pueden jugar en tu contra.
Por este motivo, el portal inmobiliario API ha elaborado un decálogo con los errores más comunes que cometen los inquilinos a la hora de arrendar una vivienda y con los pasos que hay que seguir para evitarlos.
1. No leer completamente el contrato: debes leerlo de principio a fin y no una, sino varias veces hasta que quede todo claro. Para evitar presiones, no leas el documento por primera vez delante del propietario, pídele que te envíe antes un borrador.
2. Alquilarle el piso a un conocido sin un contrato: te puede surgir una buena oportunidad para alquilarle el piso a alguien de confianza a precio de amigo pero, para tranquilidad de ambas partes, es conveniente que quede todo lo acordado por escrito.
3. No negociar: si te inquieta alguna cláusula, el precio te parece excesivo o has cedido en algo y quieres que el propietario también lo haga, debes manifestarlo y negociarlo.
4. Aceptar acuerdos verbales: cualquier cosa que te prometa el propietario debe incluirla en el contrato.
5. No firmar todas las hojas que forman el contrato: los expertos recomiendan que se firmen todas las páginas del contrato en ambas copias para que no se pueda alterar el contenido.
6. No revisar el estado del piso antes de firmar: en todo contrato de alquiler figura una cláusula referida a la compensación en caso de provocar desperfectos en el piso, normalmente a través de la fianza. Si no revisas el estado del piso antes de firmar el contrato, podrán acusarte de desperfectos de los que no eres el responsable.
7. No dejar constancia escrita de todos los desperfectos: en relación con el punto anterior, es recomendable hacer una lista escrita de los desperfectos del piso, que la firme el propietario y se adjunte al contrato. Como hasta que no te instalas en la vivienda no eres consciente de su estado, es aconsejable acordar un plazo de días para aportar la lista.
8. Pagar por adelantado: no pagues nada por adelantado hasta que no hayas visitado el piso y firmado el contrato. Si es una ganga y temes perder el piso por no pagar al adelanto, busca asesoramiento legal y hazle firmar un documento al propietario en el que se especifique que adelantas el dinero y cómo se procederá tanto si acabas alquilando el piso, como si no.
9. Aceptar cláusulas abusivas: hay propietarios que con el pánico a dar con un mal inquilino, cruzan la línea roja entre procurar un alquiler y ser abusivo con los derechos del arrendatario. No las aceptes e intenta negociarlas.
10. Asumir gastos que no te corresponden: antes de alquilar el piso debes tener claro qué gastos debe pagar el propietario y cuáles debes pagar tú. Asegúrate también de que en el contrato esté bien especificado quién debe asumir el coste de las reparaciones en caso de necesidad.