Hace unos días el Gobierno volvió a reabrir el debate sobre la tasa Google. En esta ocasión, la intención del Ejecutivo es hacer pagar un nuevo tributo a las "empresas que no pagan impuestos aquí". Una acusación que hace referencia a las compañías más grandes del mundo en el sector tecnológico como Facebook, Amazon, Google o Apple. Sin embargo, la acusación del Gobierno resulta errónea. Todos ellos pagan impuestos en España en función del dinero que obtienen en el país.
Facebook facturó 7,8 millones de euros en España durante 2016, pero tuvo unas pérdidas de 486.000 euros. Aun así, pagó al fisco 182.775 euros en concepto del impuesto de Sociedades. Después, habría que sumar la parte que el Estado se llevó de los 3,5 millones que la empresa destinó en salarios a sus empleados. Por los tanto, siendo la que menos pagó de las tecnológicas, estaríamos hablando de que seguramente superase los 500.000 euros en 2016.
Entre las cuatro grandes compañías (Google, Facebook, Apple y Amazon), en 2016, el Estado ingresó 20,3 millones de euros en función del impuesto de Sociedades. Una cantidad que se estima calculando los beneficios obtenidos en España, no los beneficios a nivel global. Además, a esos 20 millones habría que sumar los tributos que pagaron en cotizaciones sociales de sus trabajadores. En el caso de Amazon, la plantilla ha pasado de 1.000 a 3.000 empleados en nuestro país. Por lo tanto, la afirmación de que no pagan impuestos en España o que los impuestos que pagan son bajos es mal intencionada. Abonan tributos según los beneficios que obtienen en el país.
Adelante con la 'tasa Google'
El Gobierno insiste en imponer un tributo que recaudaría unos 600 millones de euros. Pero, para muchos expertos, este gravamen no afectaría solo a las compañías grandes, sino que lo haría a todas las empresas del sector tecnológico español. El consejero delegado de Ericsson en España ya ha advertido que, si este impuesto les afecta, trasladarán sus centros de I+D a Portugal, donde la fiscalidad es menos asfixiante. La patronal tecnológica AMETIC también se ha pronunciado y ha mostrado su preocupación porque este tributo puede tener "efectos perversos". Esta tasa se uniría a la propuesta por Europa que quiere gravar con un 3% la facturación de toda empresa tecnológica que supere los 50 millones de euros anuales.
Una guerra en la que pierde Europa
La Unión Europea se ha empeñado en poner trabas al sector tecnológico, especialmente a las grandes compañías, sin saber que sus normas afectan más a las compañías locales que a las americanas o asiáticas. De hecho, la nueva Ley de Protección de Datos de la UE afecta más a las empresas europeas que a las grandes como Google, Amazon, Facebook y Apple.
Una prueba de ello es que Europa está perdiendo el tren de la innovación tecnológica. De las 50 empresas más importantes del planeta en el sector tecnológico, solo 4 son europeas. Mientras que 26 son estadounidenses y 20 son asiáticas. El gran causante de esta falta de innovación sería la regulación y la falta de vanguardia en los sistemas universitarios, cada vez más desvinculados con el mundo de la empresa.
En el caso de España, solo tiene una empresa entre las 100 más importantes del mundo. Se trata de Amadeus, dedicada a proveer de soluciones tecnológicas a la industria de los viajes. Ante estos datos, un impuesto como la tasa Google solo provocaría una fuga de compañías y un nuevo freno a la innovación.