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Golpe al turismo en Barcelona: quieren que los visitantes paguen hasta 4 euros al día

Los establecimientos de lujo y cinco estrellas o los apartamentos turísticos ya pagan 2,25 euros en Barcelona.

Los establecimientos de lujo y cinco estrellas o los apartamentos turísticos ya pagan 2,25 euros en Barcelona.
Una imagen de la Sagrada Familia | Europa Press

El Gobierno municipal de Barcelona de BComú y PSC y los grupos de ERC y JxCat han pedido ampliar la tasa turística en la ciudad, para lo que aprobarán una propuesta de los republicanos en el pleno municipal de este lunes.

Para ampliar la tasa turística, el Ayuntamiento requiere que lo apruebe el Parlamento catalán, por lo que abrirán una negociación con la Generalidad para que lo traslade a la Cámara catalana, ha explicado en declaraciones a los medios el concejal de Presidencia y Presupuestos, Jordi Martí, junto al de Turismo e Industrias Creativas, Xavier Marcé, a Miquel Puig (ERC) y Elsa Artadi (JxCat).

Martí ha dicho que podría aplicarse a partir de 2020 y ha pedido a los partidos que han alcanzado el acuerdo conjurarse para lograrlo, tras lo que ha recordado que ERC y JxCat gobiernan en la Generalidad y tienen una amplia representación parlamentaria: "Este acuerdo, que necesita otros acuerdos, querría que se leyera como un primer paso para otros acuerdos para mejorar las condiciones de vida" de los ciudadanos.

La propuesta promovida por ERC pide instar a la Generalidad a trasladar al Parlamento una propuesta para modificar la ley del impuesto para incluir un recargo para estancias en Barcelona y desembarco de cruceros, que sea de un máximo de cuatro euros, aunque han descartado detallar la cifra, que deberá acordar el pleno municipal.

Aseguran que destinarán lo recaudado a mejorar el control sobre las viviendas que destinan habitaciones a usos turísticos, a mejorar a calidad de vida de los vecinos de los barrios más afectados por la presión turística y a impulsar iniciativas que contribuyan a descongestionar el turismo.

Multiplicar los ingresos

Actualmente, la tasa es de 2,25 euros en los establecimientos de lujo y cinco estrellas de Barcelona y de 1,10 euros, en los de 4 estrellas. Los apartamentos turísticos pagan una única tasa por persona y noche de 2,25 euros, y el resto de alojamientos, 0,65 euros. Además, los cruceristas pagan 0,65 euros si están menos de 12 horas en la ciudad y 2,25, si se pasan de esa cifra. Por todo ello, el año pasado se recaudaron 30 millones de euros con el impuesto, la mitad del total de Cataluña, de lo que 15 fueron gestionados por el Ayuntamiento. Si la recaudación de doblara, se recaudarían 60 en la ciudad, de los que el Ayuntamiento gestionaría 45, el 100% del nuevo recargo de la tasa y la mitad de la tasa actual.

El resto de Cataluña cuenta con tasas similares: 2,25 euros para los establecimientos de 5 estrellas, 0,90 céntimos para los de 4 estrellas y 4 estrellas superior y 0,45 para el resto de alojamientos y equipamientos turísticos. Fuera de Barcelona, los apartamentos turísticos tienen una tasa de 0,90 céntimos por persona y noche.

El concejal de Turismo, no ha querido adelantar la cifra de nueva la tasa, pero según explica El Periódico, la propuesta de ERC consiste en un recargo de cero a cuatro euros a las sumas ya citadas, que variaría en función de la zona de la ciudad, de menos a más frecuentada por el turismo, y en función de la época del año.

Puig ha destacado que ERC no quiere ni más ni menos visitantes, sino un turismo mejor, y ha destacado la importancia de que el asunto se haya acordado entre estos cuatro grupos municipales: "Esperamos que dentro de poco el Ayuntamiento disponga de una herramienta fiscal más".

Artadi ha dicho que este acuerdo supera el "debate estéril" sobre el porcentaje de la actual tasa turística que debe gestionar el consistorio, y ha explicado que lo que se propone es un impuesto de dos tramos: uno gestionado por la Generalidad y otro por el Ayuntamiento, que se detallará a través de las Ordenanzas Fiscales.

Ante críticas del sector hotelero, Marcé ha asegurado que abrirán un debate con los operadores para buscar comprensión y complicidad, y Puig ha sostenido que es normal que se opongan, pero ha defendido: "Los impuestos son un mal menor. Son un mal, pero son inevitables e innecesarios. Son los impuestos o la barbarie".

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