El Gobierno socialista no se aclara con los efectos del salario mínimo sobre el mercado laboral. El secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, ha dicho este martes que la economía ha absorbido "muy bien" la subida SMI, aunque ha reconocido "problemas" en algunos sectores como el empleo doméstico o la agricultura.
Granado ha avanzado en la rueda de prensa para presentar los datos de empleo de noviembre algunos datos de un informe sobre el impacto del alza del SMI que se ha elaborado para la AIReF y cuyas cifras "no indican", según él, destrucción de empleo por el incremento del 22,3% hasta 900 euros mensuales aprobado para este año.
"La subida ha sido un éxito", ha añadido Granado, quien se contradice reconociendo que ya ha habido problemas en sectores como el de las empleadas del hogar o la agricultura. Como ya avanzó Libre Mercado, Sánchez ha elevado el coste de los trabajadores domésticos, lo que ha provocado que la contratación se desplome y muchos de estos empleados pasen a la economía sumergida. En concreto, el empleo doméstico ha terminado con unos 13.000 afiliados menos. "¿Dónde están las 13.000 empleadas que han abandonado?", se ha preguntado Granado. "Pues probablemente han pasado a la economía sumergida", ha reconocido.
Granado ha dicho que es difícil controlar las situaciones irregulares que puede llevar aparejada esta situación y ha descartado la necesidad de una nueva regularización como la que se hizo en 2005. "Hay que convivir con esa realidad", ha declarado.
En cuanto al sector agrario, ha explicado que cuando mejora el mercado hay trabajadores que se van al sector servicios y ha apuntado a una caída del número de horas extras declaradas. "Es posible que se paguen menos horas", ha reconocido.
Jóvenes y poco cualificados, los más perjudicados
No es la primera vez que el Gobierno socialista reconoce que el Salario Mínimo destruye empleo, aunque este martes lo ha vuelto a hacer, pero a medias, ya que admite que hay sectores que se pasan a la economía sumergida, pero dice que la medida es "un éxito". La contratación juvenil, femenina y la de trabajadores con escasa cualificación, precisamente el perfil de ciudadano que los socialistas se jactan de proteger, son los más perjudicados por la subida del SMI, ya que su coste laboral aumenta.
El secretario de Estado ha añadido que, de los 430.000 empleos creados en el último año, unos 80.000 se mueven en el entorno del SMI.
Sobre la nueva subida del SMI en 2020 con la que se ha comprometido el PSOE y que Podemos insiste en aplicar, la secretaria de Estado de Empleo, Yolanda Valdeolivas, ha afirmado que no está "en condiciones de anticipar el dato" pero que se trabaja para que, si se da el escenario favorable (en alusión a una rápida formación de Gobierno), entrara en vigor el 1 de enero. Valdeolivas también ha participado en la rueda de prensa.