Las empresas de alimentación están al límite. La inflación creciente desde octubre del año pasado ya estaba empezando a afectar a todo el tejido empresarial. Después, la invasión a Ucrania mermó todavía más los negocios alimentarios, y ahora, la huelga de los transportistas los remata.
Y es que, son muchas las compañías que se han visto obligadas a parar su actividad porque la huelga de los camioneros les impide trabajar. Las materias primas con las que elaborar sus productos no llegan.
Por ejemplo, la industria láctea española anunció el miércoles pasado que se veía abocada a suspender su actividad trasformadora como consecuencia de las movilizaciones de los últimos días. Este panorama es el resultado del "desamparo y la impotencia de los transportistas ante la actuación de los mal llamados piquetes informativos que han bloqueado su actividad" señalaron.
Danone advirtió ayer martes que en el plazo máximo de 24 horas se vería obligada a interrumpir de forma temporal su actividad tanto en sus cuatro plantas en España de productos lácteos, como en las tres de agua mineral natural como consecuencia del paro del transporte y en caso de no lograrse una solución de forma inmediata. Según explica la empresa, la "inaudita" situación de inestabilidad y el agravamiento de los paros ya están comenzando a afectar al aprovisionamiento de materias primas esenciales para sus productos como leche entera o nata.
Hoy, el gigante de los lácteos ha tenido que parar dos de sus plantas en España: una fábrica de lácteos y otra de agua mineral embotellada. Fuentes de la firma han asegurado que, por motivos de "seguridad", no concretarán las ubicaciones de las plantas que han parado su producción. Además, hay otras dos plantas de lácteos en riesgo de parar la producción en las próximas horas "si no reciben leche", y la compañía augura que el problema se agrave en las próximas horas.
En la misma situación se encuentra Heineken España, que ha manifestado su "gran preocupación" por el impacto que el paro del transporte está ocasionando en sus operaciones, en el negocio de sus clientes de hostelería y de superficies comerciales, y ha advertido de que si la situación continúa así se verá imposibilitada a servir sus productos a las superficies comerciales, bares y restaurantes, y a aprovisionarse de materias primas, debido a los "violentos" piquetes que impiden las normales operaciones de la compañía.
Por su parte, Mahou San Miguel ha reconocido que están operando "con dificultades" debido al paro de transportes, que encadena ya una semana y que está impactando en sus operaciones. La propietaria de Mahou, San Miguel, Solán de Cabras y Alhambra, que
cuenta con ocho centros de elaboración de cerveza en España y cuatro manantiales de agua con sus plantas de envasado, ha reiterado que está "suministrando e intentando tener la máxima flexibilidad y garantizando la seguridad de todos".
Estrella Galicia avisa que podría haber desabastecimiento de cervezas en las tiendas. "El stock de los productos está al límite en algunos centros logísticos, los camiones cargados están parados sin poder circular ni entregar y la mayoría del reparto se ha visto afectado, incluso se han interrumpido por completo las exportaciones".
Grupo Gallo ha advertido este miércoles que, en caso de que se mantenga el paro del transporte de mercancías por carretera, también se vería "obligada a realizar un cese temporal de su actividad productiva" en las distintas factorías que tiene en el país, incluida su principal planta, en El Carpio (Córdoba), donde tiene su sede social el grupo, "ante la imposibilidad de dar salida al stock acumulado en los almacenes".
Son numerosas las empresas y cooperativas que han tenido que interrumpir sus procesos de fabricación y se han visto obligadas a cerrar temporalmente sus plantas ante la falta de suministro como Calvo, Azucarera, Cuétara, Dcoop, JaenCoop, Agrosevilla.