Ni los muebles de Ikea se salvan de la inflación. La compañía sueca ha anunciado que durante esta semana ha comenzado a subir los precios de algunos productos en España debido al incremento de los costes, aunque también se ha comprometido a ampliar el porcentaje de la gama de artículos con precios bajos y muy bajos.
Según fuentes de Ikea, han tenido que "ajustar los precios para incluir en ellos el aumento de los costes" y así poder "garantizar la sostenibilidad como empresa y el mantenimiento de los empleos". A pesar de que según su intención sigue siendo mantener los precios "lo más bajos", también afirman que no son "inmunes a la evolución macroeconómica a la que nos enfrentamos tanto a nivel global como nacional".
La multinacional sueca ha acabado repercutiendo en el consumidor la descomunal subida de los combustibles, la luz y las materias primas. También ha añadido que seguirá "vigilando lo que ocurre con los costes de transporte de mercancías, el aumento de los precios de la energía y las presiones inflacionistas para continuar impulsando iniciativas para mejorar la eficiencia a la hora de tomar decisiones sobre los precios".
En concreto, Ingka Group, dueño de la mayor parte de las tiendas de Ikea, ya anunció a finales de 2021 su intención de elevar los precios de sus productos un 9% de media en este año como consecuencia de las presiones inflacionistas en los mercados donde opera el grupo. También han recordado que el Grupo Inter Ikea durante este año absorbió costes adicionales relacionados con la cadena de suministro por valor de 250 millones de euros para "suavizar el impacto en los precios de venta al público".
Desde Ikea han recordado que el "ser asequibles" es un "pilar fundamental" para la compañía. "Por ello, siempre estamos trabajando en garantizar que haya una oferta competitiva para la mayoría de personas", han precisado. En este sentido, la firma sueca se ha comprometido a ampliar el porcentaje de la gama que consta de precios bajos y muy bajos, con la intención de que más de la mitad de la gama sea de bajo precio.
Ikea se suma así a la lista de multinacionales del gran consumo que se han visto obligadas a subir el precio de sus productos en los últimos meses como Unilever, Procter & Gamble (P&G), Nestlé, Danone, Heineken, Coca-Cola, Pepsico, McDonald’s, Primark, Inditex o Deoleo, entre otras.