La sangría bursátil de bancos, eléctricas y petroleras continúa cuando ya han pasado 24 horas desde que Pedro Sánchez avanzara varios impuestazos para estos sectores en el debate sobre el estado de la nación.
Que el Gobierno fuera a asestar un duro mazazo a las eléctricas ya estaba previsto, sin embargo, lo inesperado llegó con el palo fiscal a los bancos. La sorpresa en los mercados quedaba de manifiesto con el hundimiento de la gran banca en bolsa, que inmediatamente después de que Sánchez pronunciara las palabras "impuesto excepcional a las grandes entidades financieras" sufrieron desplomes de más de 10%. Finalmente, al cierre de sesión, CaixaBank cayó un 8,63%, seguida del Banco Sabadell (-7,44%), Bankinter (-5,08%), BBVA (-3,77%) y Banco Santander (-3,65%). Así, las entidades con mayor exposición en el mercado nacional fueron las más perjudicadas.
Los accionistas pierden casi cuatro veces más
Esto significa que las entidades afectadas perdieron sólo en la sesión de ayer la friolera de unos 5.300 millones de euros de capitalización bursátil. Esta cifra contrasta con los 1. 500 millones de euros que promete recaudar el Gobierno al año que viene con este tributo, casi cuatro veces menos que lo que se dejaron ayer los accionistas de los bancos más importantes de España. Según el Ejecutivo, el impuesto será "excepcional y temporal", con una duración de dos años, aunque no explicó cómo se va a articular.
Su implantación ha generado gran indignación en el sector bancario. "La banca paga muchos impuestos, superiores a los de otros sectores. Y una medida dirigida a un sector va en contra del principio de igualdad y distorsiona el mercado. Tampoco se conocen ejemplos de una medida así en los principales países europeos" criticó la Asociación Española de Banca (AEB),
Bancos y energéticas, en caída libre
Pero la banca no fue la única que lastró al Ibex 35 en la frenética jornada bursátil de ayer. Empresas como Repsol se dejaban un 5,73% y Naturgy (0,74%), Enagás, (0,72%), Endesa (0,63%) o Iberdrola (0,25%) también cerraban en rojo.
Detrás de este castigo estaba el anuncio de Sánchez de imponer un impuesto a las grandes empresas eléctricas, gasistas y petroleras "de carácter excepcional y temporal y que gravará los beneficios extraordinarios obtenidos en 2022 y 2023". Desde la patronal eléctrica Aelec niegan a este periódico los argumentos gubernamentales: "No solo no hay beneficios extraordinarios, sino que la crisis actual está reduciendo los resultados de las empresas eléctricas". Se estima una recaudación anual de 2.000 millones de euros al año. En total, Hacienda pretende embolsarse 7.000 millones de euros extra con los dos impuestos.
Y desde la primera hora de la mañana de este miércoles, el castigo a buena parte de las firmas que componen el Ibex 35 -y que tendrán que soportar los nuevos tributos de Sánchez- ha continuado. En la apertura de la sesión, eran bancos como el Sabadell los que se dejaban casi el 3% y, en la media sesión, eléctricas como Iberdrola perdían más del 2%. El Ibex no ha sido capaz de recuperar los 8.000 puntos ni al cierre. El selectivo madrileño ha terminado el día perdiendo un 0,8% con IAG (-3,21%), Grifols (-2,72%), Indra (-2,37%), Iberdrola (-2,32%), Ferrovial (-2,08%), Fluidra (-2,03%), y ACS (-1,85%) a la cabeza de las pérdidas.
La banca frenaba sus caídas del día de ayer. Concretamente, CaixaBank ha subido al cierre un 0,19%, BBVA, un 0,11% y Banco Sabadell, un 0,03%. Por su parte, Bankinter ha cerrado prácticamente plano (-0,04%), mientras que Santander ha visto cómo el valor de sus títulos se ha recortado un 0,81% al cierre.
"Nos movemos en un entorno de elevada incertidumbre. Si el mercado sigue poniéndose nervioso sobre una posible recesión y las consecuencias de la misma sobre la evolución de las provisiones en la banca, a lo que se suma el impacto negativo del impuesto anunciado (pendiente de ver como se articula y si sale adelante) consideramos que las cotizaciones de los bancos podrían continuar presionadas hasta que no haya algo más de visibilidad" anticipa la analista de Renta 4, Nuria Álvarez, a Libre Mercado.