Menú

Francia quiere limitar los vuelos de los jets privados y hacerlo a escala europea

En España, Sánchez recurre al clima para advertir a los ciudadanos de la emisión de CO2. Sin embargo, siempre que puede escoge el Falcon.

En España, Sánchez recurre al clima para advertir a los ciudadanos de la emisión de CO2. Sin embargo, siempre que puede escoge el Falcon.
Alamy

El ministro francés de Transportes, Clément Beaune, pretende limitar los vuelos en jet privado bajo el argumento de luchar contra el cambio climático y reducir el consumo de energía. Sin embargo, para que esa medida sea eficaz, Beaune quiere que se aplique a nivel europeo.

"Creo que hay que actuar y regular los vuelos en jet privado. Se están convirtiendo en el símbolo de un esfuerzo a dos velocidades", explica Beaune en declaraciones publicadas este domingo por Le Parisien. Según la ONG Transport & Environnement, una décima parte de los vuelos en Francia corresponden a reactores privados. En las últimas semanas están teniendo mucho eco las cuentas en redes sociales que hacen un seguimiento crítico de los desplazamientos en aviones exclusivos de millonarios y famosos.

Le Parisien precisa que el ministro francés baraja diferentes posibilidades, que irían desde medidas de incitación para reducir el recurso a esos vuelos a una reglamentación que impusiera restricciones, pasando por gravámenes que tuvieran efecto disuasorio.

Entre los escenarios está obligar a las empresas a hacer públicos sus desplazamientos en avión privado o un dispositivo para enmarcar su uso e incluso impedirlo cuando existe una alternativa con vuelos comerciales o con tren.

Los políticos están intentando, como siempre, atacar cualquier forma de desplazamiento. En los últimos años, sobre todo desde la pandemia, los Estados y los entes supranacionales han cargado fervientemente contra el transporte aéreo, aunque estaban dejando a un lado a los jets. Tanto es así, que en 2021 la Comisión Europea ya diseñaba un nuevo impuesto al transporte aéreo con los jets privados exentos.

Asimismo, la hipocresía de los ecologistas es llamativa ante este tema, ya que abogan por la reducción de las emisiones de Co2 mientras ellos siguen disfrutando de sus jets privados. Como es el caso del actor Leonardo Di Caprio, que tiene un de los yates más grandes del mundo y vuela habitualmente en su jet privado. Tan solo en 2014, los seis viajes consecutivos que realizó en su jet privado en apenas mes y medio supusieron un total de 44 toneladas de emisiones.

La cruzada de Sánchez contra el coche particular

En España, Pedro Sánchez recurre constantemente a la apelación climática para advertir a los ciudadanos españoles de lo dañino que es la emisión de CO2. Sin embargo, siempre que puede escoge el avión Dassault Falcon 900 para desplazarse.

Así, Sánchez no duda en viajar en este modelo VIP mientras carga contra el uso del avión en los viajes del resto de ciudadanos, tal y como como consta en su controvertido Plan España 2050, donde destaca la intención del Gobierno de suprimir los denominados vuelos cortos, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental del transporte aéreo.

Además, Sánchez no solo se ha limitado en cargar contra los viajes de avión, el coche particular también está entre sus objetivos. En el capítulo III del decretazo de Sánchez "incluye medidas de fomento del transporte público colectivo y de aseguramiento de la movilidad cotidiana obligada", como señala el texto. El presidente afirma que el coche es "un medio que, por otro lado, tiene asociados una serie de costes externos muy elevados que tampoco la sociedad actual puede soportar".

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios