Una de las sorpresas envenenadas de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 2023 ha sido la subida de los coeficientes máximos del Impuesto de Plusvalías (Libre Mercado lo destapó aquí). Nada se había anunciado y nada se preveía al respecto. Todo lo que se hace de tapadillo (y más viniendo del Gobierno Snchz), demuestra una mala intención. Aún así, cabe hacerse la pregunta: ¿por qué lo han hecho? La respuesta, como veremos, resume a la perfección la disparatada lógica política del socialismo.
Empecemos por recordar qué es el Impuesto de Plusvalías. Plusvalías es el impuesto que grava el incremento de valor de los terrenos urbanos durante el tiempo en el que se tienen en propiedad. De naturaleza municipal, se paga en el momento de la transmisión del inmueble, sea por compraventa o por herencia. Aunque el impuesto es municipal, los coeficientes a aplicar los establece el Estado, de forma que cada municipio decide el tipo a aplicar, pero siempre dentro de la horquilla establecida por el Estado. Lo que ha hecho Snchz es subir los topes máximos de esas horquillas (¡hasta un 50%!). En consecuencia, los Ayuntamientos que así lo decidan podrán cobrar más por los inmuebles vendidos o heredados en su término municipal.
Es evidente que este es un impuesto que paga todo el mundo, nada de "impuesto a los ricos". Una vez más, se demuestra que la promesa de la ministra Montero de que no subiría los impuestos "a las clases medias y trabajadoras" fue una trola absoluta. Pero, claro, nadie llega a número dos del PSOE diciendo la verdad.
El Impuesto de Plusvalías es un impuesto antipático, en particular para los que heredan. En el caso de una herencia, es habitual -sobre todo en las Comunidades Autónomas gobernadas por el PP-, que se paguen más impuestos por Plusvalías que por Sucesiones (a lo que se suma el problema de no tener liquidez para pagarlo). Una subida municipal de Plusvalías anula el efecto benéfico que pueda traer una bonificación autonómica del Impuesto de Sucesiones.
Además, es llamativo que un Gobierno que presume de querer bajar el precio de la vivienda suba un Impuesto que va a encarecer directamente la compraventa de viviendas.
En todo caso, merece la pena insistir en la pregunta inicial: ¿por qué esta subida de impuestos? Durante las comparecencias celebradas esta semana con ocasión de la presentación de los PGE 2023, el Gobierno ha admitido que las cuentas municipales están saneadas. El conjunto de los Ayuntamientos en España tuvo un superávit en 2021 del 0,27% del PIB, tiene amplios ahorros y, por lo tanto, no necesita subir impuestos.
Si el conjunto de los Ayuntamientos españoles no necesita esta subida de impuestos, entonces, ¿por qué se hace? Todo apunta a que es a instancias de una "minoría privilegiada" de municipios mal gestionados, pero con la influencia política suficiente para convencer a Hacienda de subir los coeficientes. Es una subida con nombres y apellidos, acordada en los despachos, que se ha ocultado hasta ahora. El Gobierno debiera de hacer públicos estos nombres y apellidos cuanto antes.
En resumen, esta subida premia a los municipios que peor gestionan. Esta es la lógica del Gobierno de Snchz: cuanto peor gestiones, más facilidades se te darán para subir impuestos y que los ciudadanos deban pagar de su bolsillo el efecto de tu mala gestión.
Y una última idea. Esta subida, de aprobarse, alentará la competencia fiscal entre municipios, esa misma que tanto aborrece el Gobierno entre Comunidades Autónomas. Es cierto que la vivienda está donde está y no se puede trasladar entre municipios. Pero, al mismo tiempo, quien suba los coeficientes de Plusvalía seguramente ya tendrá al máximo sus coeficientes del IBI. Es decir, esta subida agravará (sin definir del todo), las diferencias de presión fiscal entre municipios. No debiera sorprendernos que los vecinos decidan votar con los pies, abandonando su residencia en los municipios que más les exprimen con sus impuestos municipales.
Percival Manglano, diputado en el Congreso por Madrid (PP)