Los bosques de pinos que flanquean al Tajo en los Montes Universales estaban nominados a ser "Bosque del Año". Sin embargo, desde hace algunas semanas sufren una auténtica deforestación que ya se ha llevado por delante 50.000 árboles.
Fuentes cercanas a la zona, consultadas por Es la Mañana de Federico en esRadio, aclaran que las talas que se habían quedado suspendidas durante la pandemia están teniendo lugar ahora, de golpe, y sin dar margen a la repoblación. A esto se suma la alta demanda de biomasa, (de pellets) y el interés en dejar suelo degradado. O lo que es lo mismo, vía libre para la instalación de molinos y fotovoltaicas.
Francisco Prieto, director del observatorio de sostenibilidad de Castilla La Mamcha, explicaba en esRadio Guadalajara que la gestión forestal tradicional se ha perdido: "Antes iba un técnico que iba diciendo este árbol sí, este no, en este árbol hay un nido. Y se hacía con unas vías de entresaca intentando no impactar en el ecosistema"
Esto se ha sustituido ahora por grandes máquinas procesadoras que no tienen capacidad de cribado y cuyas ruedas dejan surcos de hasta 1 metro de profundidad. Lo talan todo a su paso. Tanto árboles finos, que son el verdadero objetivo de estas máquinas porque talarlos ayuda a que los gruesos crezcan más rápido, como árboles añejos. El resultado es un suelo difícil de repoblar.
Transformar vida en suelo industrial
"En Guadalajara, Cuenca y Teruel nacen como 7 ríos. Impresionante. En vez de protegerlos lo que se está haciendo ahora es transformarlos en un modelo industrial al que hay que añadir más riesgo de incendio", explica Francisco.
Todo esto, en connivencia con el Gobierno de Aragón "a través del Director General de Gestión Forestal", Diego Bayona Moreno, que paradójicamente, da luz verde a prácticas ilegales en el suelo que debe proteger. "En concreto, en la zona de Teruel están cortando dentro de la propia ribera del río utilizando un cauce como pista forestal y esto es ilegal"
Están desapareciendo las mariposas y los hongos. De hecho la Sociedad Micológica ya se ha quejado del daño al bosque. La Asociación SOS Montes Universales ha recogido 100.000 firmas para paralizar estos proyectos e incluso ha elevado una queja a la UE que ya ha contestado exigiendo a la administración más controles ambientales y mayor rigor.
Algo que puede dejar sin efecto la propia Unión, porque choca con el polémico nuevo reglamento europeo que se está decidiendo en Bruselas y que precisamente pretende eliminar todos los controles para agilizar la implantación de molinos y fotovoltaicas.
La declaración como Parque Nacional divide a los vecinos
Para muchos vecinos la única solución para preservar estos parajes y sus especies animales y vegetales en peligro de extinción, es que estos bosques sean considerados Parque Nacional. "Todos los molinos de Orihuela, por ejemplo, no se podrían poner bajo esta figura porque lo que se buscaría es la conservación"
Sin embargo, otra parte de los vecinos con la que hemos hablado en Es la Mañana, consideran que esta opción impactaría considerablemente en aquellos que viven de la caza o la micología. Sectores con los que parte de la población de estos lugares obtiene unos ingresos extra.
Es más, cuando una zona se declara Parque Nacional, el Estado está obligado a indemnizar a aquellos a los que ha privado de los ingresos que les reportaba una actividad que en muchos casos generaba riqueza, e incluso empleo. Por ejemplo, prohibir la caza en Parques Nacionales está costando a los españoles 320 millones de euros en toda España, sólo en indemnizaciones. A esto hay que sumar los gastos en control poblacional.
Sospechas sobre Forestalia
La silueta de los pinos desaparece y, en su lugar, se cierne ahora sobre el Tajo la alargada sombra de Forestalia.
Esta madera está destinada, sobre todo, como apuntábamos al inicio, a la fabricación de pellets. Y, precisamente, Forestalia, inauguraba en 2019, en presencia de Lambán, la mayor planta de este biocombustible en España. Se llama Arapellet y está situada en Erla, en Zaragoza.
Según su web, se nutre de madera obtenida a 250 km de este municipio. No especifica la zona, pero coincide con la distancia a la que se encuentra el Alto Tajo. Sin embargo, las 140.000 toneladas que dicen producir, no se quedan en España: Se exportan al extranjero. Al igual que ocurre con la electricidad producida por los molinos, el beneficio, no queda en casa.