Desde que en marzo del año 2020 se cerrase todo, incluso se encerró a la población, el PIB en España no ha hecho más que caer. El año 2023 ha dado pistoletazo de salida y lo ha hecho con malas noticias. La mayoría de países del entorno español ha crecido desde el inicio del Covid, solo 4 países han visto decrecer si producto interior bruto y el que lo hace con mayor con diferencia es España.
Los datos recogido por Eurostat desde el inicio de la pandemia hasta la mitad del año pasado, ha dejado en evidencia los datos de crecimiento que pregona el Gobierno allá donde va. "La gran evolución del PIB, la robusta recuperación económica y la menor inflación". Todo ello contradice los datos económicos de PIB, es decir, la riqueza y que sitúan a España el último de Europa.
La contraposición de España que, cae más de dos puntos y medio, es Irlanda que crece más de un 26% por el simple hecho de tener una política económicamente liberal. Incluso la quebrada Grecia crece un 2,8%. Italia, que tiene una gran deuda también crece.
Las políticas económicas de Sánchez son las que hacen que España tenga los peores datos de Europa. 54 subidas de impuestos, 17 subidas de cotizaciones sociales, no ayuda a las empresas, está generando un clima de desconfianza en España y viola las instituciones, por mucho que hable de los escudos sociales, sus políticas nos llevan a estar en el último puesto de este Ranking.