El Gobierno insistirá en que mantenemos una inflación moderada y empleará el dato medio de los precios de los alimentos, que se modera muy ligeramente por debajo del 15% (13,9%), lo que significa que mantenemos una tensión muy alta en los precios, tanto generales, como específicos de los gastos corrientes de los españoles.
Los datos de inflación si confirman algo es que la moderación de los precios que esperaba el Gobierno no ha llegado. Más bien al contrario, continúan fuertemente tensionados. El deterioro de nuestro poder adquisitivo crece.
Según nos cuenta el INE la tasa de variación anual del IPC del mes de abril se sitúa en el 4,1%, ocho décimas por encima de la registrada en marzo. Un dato que es producto del efecto escalón entre marzo y abril de 2022, cuando la inflación pasó del 9,8 al 8,3. Por ese motivo ahora hemos pasado de un IPC en marzo del 3,3% frente al 4,1 de este mes de abril.
En cuanto a la inflación subyacente, en tesa interanual disminuye unas décimas hasta el 6,6%, frente al 7,5% del mes de marzo.
En cualquier caso, para comprender mejor en cuánto se está deteriorando nuestro poder adquisitivo o, mejor dicho, a qué ritmo, para evitar las fluctuaciones y el efecto escalón, y al ser característico de esta estadística el hecho de que la inflación se acumula, veamos el resultado que tenemos en los dos últimos años.
Así, el acumulado de los dos últimos años en tasa interanual del mes de abril es del 12,4%. Es decir, que hace justo dos años teníamos un 12,4% de poder adquisitivo más, podíamos comprar un 12,4% más cosas con nuestro dinero, o que nos hemos empobrecido un 12,4% en dos años. En el mes de marzo el acumuldao de los dos últimos años es del 13,1%, un nivel muy similar y en sintonía, lo que significa que la tendencia sigue siendo muy alta.
En cuanto a la inflación subyacente el comportamiento de los dos últimos años es similar y creciente. En abril presenta un acumulado (recordemos, eliminando los precios energéticos y los de los alimentos no elaborados) del 11 % en los dos últimos años, frente al 10,9% acumulado del mes de abril. Es decir, que la inflación subyacente acumulada está muy cerca de alcanzar al IPC acumulado.
Este fenómeno es una mala noticia, ya que habla de un fuerte riesgo a que la inflación sea un problema crónico y amenaza con ser mucho más duradero de lo que habríamos querido.
Es más, si observamos la tasa de variación mensual del índice general, sigue registrando alzas en el cómputo total e lo que llevamos de año, un 1,7% acumulado.
El precio de los alimentos
El IPC de los alimentos se modera ligeramente del 15% al 12,9% (unos niveles de precios inaceptables) y que indican que el IPC acumulado sobre el precio de los alimentos sigue siendo altísimo.
No en vano, la carne y el pescado siguen acumulando fuertes subidas de precio desde el mes de marzo, como el azúcar y el pan. También aportan al IPC los servicios de alojamiento, el calzado y los paquetes turísticos.