Desigualdad ante la ley o, si se prefiere, diferencia de trato en función del interés político. Esta es la nueva tónica que existe en España. Y no sólo en el ámbito judicial, tras la polémica amnistía que se pretende conceder a los separatistas catalanes encausados y condenados por el procés, sino también a nivel financiero y fiscal.
El Gobierno de Pedro Sánchez reduce el margen de maniobra que poseen las regiones de régimen común, con especial atención a Madrid, mientras refuerza la autonomía financiera de las comunidades gobernadas por sus socios nacionalistas, como es el caso de Cataluña y País Vasco. En el primero, mediante la negociación de un nuevo fuero que permitirá a la Generalidad recaudar el 100% de los impuestos, y en el segundo mediante la cesión de un mayor margen fiscal.
El Gobierno aprobó a finales de 2022 el Impuesto a las Grandes Fortunas para castigar a la regiones que, como Madrid y Andalucía, habían optado por eliminar Patrimonio. Y todo ello usando como excusa la "armonización fiscal", a fin de evitar la competencia tributaria a la baja entre CCAA.
Sin embargo, esta particular recentralización, avalada posteriormente por el Tribunal Constitucional de Cándido Conde-Pumpido, no se aplica por igual en todas las regiones. La primera gran diferencia es que PNV y PSOE pactaron a finales del pasado año que las diputaciones vascas podrían regular y recaudar este nuevo tributo, adaptándolo a la normativa foral que marca el Concierto Económico.
Además, a diferencia del resto del país, donde ya se aplicó en 2022, el Gobierno vasco pretende empezar a cobrarlo en 2023, un año más tarde, siempre y cuando logre aprobarlo antes de que acabe el ejercicio. Y la tercera gran diferencia es que la fiscalidad sobre las grandes fortunas será también más suave en el País Vasco.
La filial vasca de Podemos ha llegado a un acuerdo con el PNV y los socialistas para aprobar finalmente este tributo en las tres diputaciones forales, pero con tipos más bajos que en el resto de España:
- Los patrimonios de más de 14,5 millones de euros soportarán un tipo máximo del 3,5%, frente a los 10,6 millones en el resto del país
- Los patrimonios comprendidos entre 12,8 millones y 14,5 sufrirán un tipo del 2% en Vizcaya y del 2,5% en Guipúzcoa y Álava, por debajo del 3,5% que se aplica en el resto del territorio nacional
Y algo similar sucede con el resto de patrimonios afectados:
- Vizcaya aplicará un tipo del 1,5% desde 3,2 millones a 6,4 millones; y del 1,75% hasta los 12,8 millones
- Álava y Guipúzcoa gravarán con el 1,7% los patrimonios a partir de 3,2 millones y hasta los 6,4 millones; y con el 2,1% hasta los 12,8 millones
- En el resto de España, el tipo aplicable es del 1,7% entre 3 y 5,3 millones de euros; y del 2,1% entre 5,3 y 10,6 millones