El fichaje de David Broncano por RTVE se oficializó ayer miércoles y ha vuelto a reabrir el debate sobre la gestión del ente de radiodifusión pública. El hecho de que la corporación esté dispuesta a garantizar la friolera de 28 millones de euros al cómico ha puesto de manifiesto los abultados desembolsos que viene realizando el citado organismo desde que Pedro Sánchez llegó al gobierno.
El presupuesto de RTVE ascendió a 1.193 millones de euros a lo largo del pasado ejercicio 2023. Si nos vamos al último año completo de gestión de Mariano Rajoy, encontramos que los recursos de la corporación se situaban en 972 millones por ejercicio. Así pues, la Era Sánchez ha inflado los recursos del ente en un total de 221 millones.
Parte importante de este gasto se dedica al pago de salarios. De hecho, RTVE suma un mayor gasto en plantilla que Atresmedia y Mediaset juntas. En total, el ente público tiene en nómina a 6.537 personas que suponen un gasto cercano a los 450 millones, muy por encima de los 170 millones de Atresmedia o los 90 millones de Mediaset.
Además, se da la circunstancia de que Radio Televisión Española abona parte de estos gastos aumentando su endeudamiento. En los cinco últimos años, coincidiendo con la gestión de Pedro Sánchez, las obligaciones bancarias de la corporación han subido un 56%, pasando de 145 millones en 2018 a 230 millones a cierre de 2023.
La 1 es la joya de la corona del ente público, pero su audiencia ha evolucionado muy a la baja. El pasado mes de marzo, su audiencia media fue del 9,2%. Por comparación, en marzo de 2018, antes de la moción de censura que llevó al poder a Pedro Sánchez y dejó la corporación en manos del nuevo gobierno de izquierdas, el share del canal era un 14% mayor.
A lo largo de los años, RTVE se ha acostumbrado a desembolsar cantidades millonarias para retransmitir eventos deportivos que logran mejorar sus audiencias pero desplazan a competidores privados que pujan por dichos derechos de imagen pero se ven limitados por la obligación de cuadrar las cuentas. Desde 2007, el ente público ha gastado 1.460 millones solamente en este tipo de operaciones.
El ejemplo más reciente lo tenemos en la próxima Eurocopa, que costará 40 millones al erario público, en un paquete que incluye 51 encuentros. También emitirá RTVE los Juegos Olímpicos de París, con un coste de 66 millones. El Mundial de Catar, transmitido a finales de 2022, supuso otros 32 millones a cambio de 19 encuentros.
En los últimos años han trascendido distintos contratos de RTVE con productoras varias. Conocido es el caso de la serie Cuéntame cómo pasó, que suponía un desembolso de 760.000 euros por episodio. También ha traído polémica el contrato para la emisión de La Hora de la 1, que hace dos temporadas suponía más de 16 millones de gasto para la corporación.
Ahora, la contratación de David Broncano vuelve a poner encima de la mesa las cifras desorbitadas que maneja la compañía estatal. La idea de los gestores del ente es garantizar al cómico 28 millones por dos temporadas y el objetivo explícito de la operación es el de competir con un programa privado: El Hormiguero de Antena 3. Como referencia, la audiencia de Broncano en su programa La Resistencia de Movistar Plus ascendía al 0,4% en 2018, con 42.000 seguidores por programa, y ha caído desde entonces hasta alcanzar el 0,1% en marzo de 2024, que ha sido el peor mes histórico del programa, con un promedio de apenas 7.000 espectadores.
Las cifras de abril podrían ser aún más bajas, puesto que la primera semana del mes arranca con un 0,06% de cuota de pantalla y un seguimiento medio de 5.000 personas por episodio. En redes sociales, el programa alcanza un seguimiento adicional pero, por ejemplo, su episodio más visto en Youtube en los primeros días de abril se quedó por debajo de los 200.000 visionados. Ese mismo día, El Hormiguero consiguió más de 2 millones de espectadores.