Irene Montero ha publicado este jueves en su perfil de X (Twitter) un vídeo donde básicamente se burla del problema que hay en España con los "okupas". En este vídeo, Montero pronuncia frases irónicas como "madre mía con el problema de la okupación, ¿eh?" o "hay que ver estos okupas" mientras muestra ofertas de alquiler de pisos o capturas de pantalla donde se cuenta como los españoles dedican un alto porcentaje de su sueldo a pagar el alquiler.
De esta manera, la eurodiputada que percibe un salario anual de más de 120.000 euros (o más de 10.000 euros al mes) se ríe en la cara de todas aquellas personas que están sufriendo este grave problema social que es el del movimiento okupa, al que ya hemos dado voz más de una vez en Libre Mercado.
La exministra de Igualdad y actual secretaria de política de Podemos, trata de restarle o negarle importancia al problema de la "okupación" comparándolo con otros problemas existentes en nuestro país, como es el de los altos precios de los alquileres o el elevado porcentaje del salario que le dedican muchas personas a pagar su alquiler.
Montero cae en una "falacia del falso dilema", como si hubiera que elegir entre un problema como es el de la "okupación" (que ella niega que sea un problema) u otro problema como es el del precio de los alquileres. Ambos son un problema que afecta a distintas partes de la población española, y por el hecho de que afecte a más o menos personas no hace que deje de ser un problema al que hay que darle solución.
No obstante, lo curioso de todo este asunto es que en el vídeo sí que califica de okupas a aquellos inversores extranjeros que estarían comprando edificios de vivienda para dedicarla al alquiler. Es decir, a quienes "okupan" una vivienda de gente humilde no se les llama por su nombre, pero a quienes adquieren de forma legal una serie de propiedades sí que se les califica de lo que no son. Es el mundo al revés.
En definitiva, la cada vez más irrelevante Irene Montero ha vuelto a reírse de todas aquellas personas que están sufriendo en sus propias carnes el problema de la "okupación", negando una vez más esta realidad y blanqueando un delito que cada vez encuentra en España una mayor protección, mientras que se sigue dejando desamparados a los verdaderos dueños de esas viviendas.