Aparicio califica de "razonable" el plazo marcado por los agentes sociales

El ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, ha calificado de "razonable" el plazo fijado por los representantes de los sindicatos y la patronal para culminar las negociaciones sobre la reforma laboral, aunque ha recordado que el Gobierno se reserva el derecho de legislar al respecto en beneficio de los ciudadanos si no se alcanza un acuerdo satisfactorio. "La negociación señala que son los propios agentes sociales los que demuestran su sentido de la responsabilidad dotándose de una agenda y un calendario", ha indicado Aparicio.

El plazo fijado, hasta febrero, "parece un tiempo razonable, es un hecho positivo que los agentes sociales se doten de un calendario y también parece positivo que éste sea intenso". En este sentido, el ministro ha destacado que a lo largo de diciembre también se han programado reuniones para avanzar en el objetivo de "perfeccionar" el mercado laboral "dotándole de un marco razonable de equilibrio entre flexibilidad y garantías". A juicio de Aparicio, tanto los sindicatos, la patronal y el Gobierno "buscan que el importante crecimiento del empleo que hay ahora en España pueda estabilizarse en una velocidad de crucero", así como dotar al mercado laboral de "una mejor calidad".

El titular de Trabajo ha abogado por repetir el esquema del Pacto de Toledo "que ha aportado importantes beneficios a la sociedad española". En cuanto al margen de maniobra que permiten las fechas, Juan Carlos Aparicio ha insistido en que “el gran deseo del Gobierno es que se pueda trasladar a esa Ley de Presupuestos algunos de los contenidos (de la reforma). Aún hay tiempo porque si se trata de acuerdos de calado no tengo ninguna duda de que se sabrán adaptar a los procedimientos". No obstante, el Ejecutivo “también se reserva la posibilidad de actuar si considera que es urgente y necesario para el interés general, aunque en principio nuestro objetivo es seguir contribuyendo al clima de diálogo", ha advertido el ministro.