L D (EFE) El Consejo propondrá en la próxima Junta General de Accionistas la incorporación de Blanco al órgano de dirección de la compañía, condición necesaria para ser nombrado consejero delegado. Ramón Blanco ocupa actualmente la vicepresidencia corporativa de la petrolera y no forma parte del Consejo de Administración. El nombramiento de Blanco fue propuesto por el presidente ejecutivo de Repsol YPF, Alfonso Cortina, que mantendrá todas sus competencias actuales, y fue posible gracias al pleno apoyo de los accionistas de referencia, La Caixa y BBVA.
El bache que atravesó el grupo durante el primer semestre a causa de la crisis argentina, unido al cierto descontento de una parte del núcleo accionarial, imposibilitaron que el presidente del grupo colocara a su mano derecha en el segundo puesto de mando en mayo. Ramón Blanco asume desde ahora, como vicepresidente operativo, todas las funciones que le corresponderán como consejero delegado. En la reunión del Consejo de Administración, Cortina dijo que la designación de Blanco "está en línea con las últimas medidas adoptadas encaminadas a fortalecer la gestión de la compañía".
Ramón Blanco, leonés de 50 años, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense, Inspector de Finanzas del Estado y Auditor de Cuentas. Se incorporó a Repsol YPF en 1996 como consejero y presidente del Comité de Auditoría del Consejo de Administración, cargo que abandonó para desempeñar funciones ejecutivas. Desde el año 2000, Ramón Blanco es vicepresidente corporativo, con un papel relevante en las actividades de la compañía en América Latina. El pasado mes de mayo, Blanco asumió, además, la responsabilidad directa de los negocios de gas y electricidad.
Para que el nombramiento se haga efectivo, Ramón Blanco tendrá que ser designado primero como vocal del consejo. Posteriormente será sometido a la Junta General de Accionistas, que se celebrará la próxima primavera. Hasta entonces, ocupará oficialmente el cargo de vicepresidente operativo.
El bache que atravesó el grupo durante el primer semestre a causa de la crisis argentina, unido al cierto descontento de una parte del núcleo accionarial, imposibilitaron que el presidente del grupo colocara a su mano derecha en el segundo puesto de mando en mayo. Ramón Blanco asume desde ahora, como vicepresidente operativo, todas las funciones que le corresponderán como consejero delegado. En la reunión del Consejo de Administración, Cortina dijo que la designación de Blanco "está en línea con las últimas medidas adoptadas encaminadas a fortalecer la gestión de la compañía".
Ramón Blanco, leonés de 50 años, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense, Inspector de Finanzas del Estado y Auditor de Cuentas. Se incorporó a Repsol YPF en 1996 como consejero y presidente del Comité de Auditoría del Consejo de Administración, cargo que abandonó para desempeñar funciones ejecutivas. Desde el año 2000, Ramón Blanco es vicepresidente corporativo, con un papel relevante en las actividades de la compañía en América Latina. El pasado mes de mayo, Blanco asumió, además, la responsabilidad directa de los negocios de gas y electricidad.
Para que el nombramiento se haga efectivo, Ramón Blanco tendrá que ser designado primero como vocal del consejo. Posteriormente será sometido a la Junta General de Accionistas, que se celebrará la próxima primavera. Hasta entonces, ocupará oficialmente el cargo de vicepresidente operativo.