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El mito de las pensiones privadas argentinas y el ejemplo chileno

Siempre habrá ladrones al frente del Estado que amenazarán a las pensiones públicas y a las privadas. La diferencia es que las primeras se derrumban en la miseria sin necesidad de políticos ladrones. Ustedes verán.

Rearden_ dijo el día 14 de Febrero de 2010 a las 10:34:

un_notas:

Aunque los cálculos sean erróneos, aunque los importes se redujeran a la mitad, la diferencia mas importante se encuentra entra la libertad y la esclavitud, la libertad que se desprende del derecho de propiedad de unos bienes que solo te pertenecen a ti y a tus herederos en caso de fallecimiento y la esclavitud que se desprende de la dependencia de un estado que arbitrariamente te asignara los recursos que el estime adecuados.

Usted decide, ser libre para forjar su futuro y el de los suyos o esclavizarse voluntariamente quedando usted y los suyos al albur de las decisiones de otros.

Siervos de un estado o ciudadanos de una nación, en nuestras manos esta elegir.

un_notas dijo el día 13 de Febrero de 2010 a las 19:12:

Sí, devastadores cálculos porque usa 6.000 euros como aporte anual. Que descuente el gasto de un seguro privado que cubra a la familia y de un seguro de desempleo y entonces empecemos a discutir sobre la metodología empleada.

Y no, por mucho que diga Albert, la sanidad y el paro no se hace a cargo del presupuesto, si bien es cierto que en España el presupuesto interviene para esto (al contrario que Francia o Alemania) la mayor parte de los ingresos para sanidad y paro se hace con las aportaciones a la Seguridad Social que él ha empleado sólo para pensiones.

De risa...

HispAmr dijo el día 13 de Febrero de 2010 a las 16:19:

Puede investigar si es cierto este dato. Los fondos de pensiones (aparte de ser sucursales bancarias y cobrar comisiones exageradas con el permiso del gobierno), fueron obligados a prestarle el dinero al mismo gobierno con un interés bajo y actualizados de acuerdo a la inflación. La inflación, la medía y la mide el mismo gobierno con una estadística escandalosamente falsa, que la misma presidenta habría hecho cómplice a empresarios españoles en Madrid cuando los invitaba a invertir, ya que de esa manera se "ahorraba" mucho dinero al gobierno y a un presupuesto con superávit.