Una de mis abuelas,que vivio 100 años y tubo 7 hijos;los tubo,simplemente, porque no pudo evitarlo.Incluso mi propia madre,con solo tres,si hubiera podido elegir,hubiera descartado uno ,o tal vez incluso dos.
Asi que no fantaseemos con supuestas epocas idilicas.
Las familias "normales"(descartando fanatismos e ideologias multiples)hoy en dia,solo se plantean(si lo hacen)tener un hijo,o como maximo dos.
El porcentaje de divorcios y separaciones,cada año,es del 50% de los matrimonios y uniones,que son unas 200.000;por lo que la mayoria de la gente sensata,que no puede saber de antemano la duracion de su relación(recordemos que está demostrado "fisiologicamente",que el enamoramiento-emparejamiento, no va más alla de los 6-7 años),es logico que sea "prudente",a la hora de traer hijos al mundo;sobre todo despues de ver ,en qué situacion economica quedan los padres divorciados.
Con "cinco millones de parados" y el resto temiendo estarlo; y tal vez una decada economicamente perdida;seran "millones",los españoles que no podran tener hijos,ni aunque lo deseen.
Asi que la situacion demografica actual que se nos describe,será una "broma",en relacion con la que nos encontraremos dentro de una decada.
¿Comprenden la obsesion de ZP con el aborto.
El conoce las cifras,y sabe que desde los Romanos,con botellon y orgia futbolistica y ó de la otra;y pildora del dia despues o aborto,la peña se queda satisfecha;y él,o el otro,o el que venga despues,a seguir viviendo opiparamente;como mister bono,a costa de los millones de tontos,que se pasan la vida hipotecados,para mayor bienestar suyo y el de su casta politico-financiera-especulativa-constructora;!qué nó empresarial!
En el mundo sobran muchos "miles de millones" de ciudadanos;ya vamos camino de los 7.000 millones y la tierra no puede con todos; viviendo en el standar de vida occidental,al que "todos" aspiramos",y al que "nadie" está dispuesto a renunciar.
Tal vez en pocos años,veamos emigraciones "masivas" a occidente;o el declive irremediable del mismo,ante el afianzamiento de paises como China e India,que pasaran a ser los nuevos lideres mundiales.
Salvo que alguien lo remedie,pues los "ebolas" estan listos ,solo falta que "alguien"en occidente,por supuesto,de la "orden" de dispersarlos.
Para aileda62.
Los puntos numerados que nos has dado, es cierto, es un gran esfuerzo.
No puedo estar de acuerdo con el punto 6º; en mi caso, cerca de 700 euros de todo lo que obtengo por mi trabajo, es recaudado como impuestos. Hace años que no necesito visitar al médico, y provoco muy pocos gastos al Estado, comparado con otros. Y me siento orgulloso de aportar mi granito de arena en los servicios sanitarios que recibe tu hija, sus estudios, becas y resto de ayudas. Y en esa pequeña porción de la pensión que reciben, si es el caso, tus ancianos.
Estoy totalmente de acuerdo en la necesidad de primar, desde el Estado y administraciones, a la familia. Todas las ayudas posibles. Con seguridad jurídica plena para todos sus miembros. Y sin que se inmiscuya en sus asuntos privados.
Finalmente hay que reconocer el valor y el amor de aquellos que, a pesar de toda adversidad, forman una familia.
Un saludo.
Me gustaría terciar con algunas consideraciones adicionales a estos comentarios que me parecen de lo más sensatos y razonables, en especial los del Sr. Macarrón al que felicito.
La primera es que efectivamente, el sentido hedonista y la mejora de la calidad de vida, han conducido a la civilización Occidental a una óptica distinta del binomio trabajar-procrear al de trabajar-lo-mínimo-pasarlo-bien-y-divertirse-que-son-dos-días.
En época de mi abuelo, cuando la estructura social era mayoritariamente agraria, el plan vital consistía en trabajar duramente; tener varios hijos varones que siguieran con la "labor" y alguna hija que se encargara de la vejez de sus padres. Así de escueto y así de duro porque los tiempo lo eran y la supervivencia lo exigía.
Vinieron los tiempos "modernos" y las premisas cambiaron drásticamente. Ahora somos capaces de engendrar a la carta a un ser humano que sirva para curar a un hermano, pero nos parecería una monstruosidad machista tener una hija con el único fin de que se ocupara de sus padres.
Nada que objetar por supuesto, pero tengo para mi que la solución del problema no pasa por convencer a los padres a que tengan más hijos. Aunque a mi ya se me pasó el arroz en ese sentido, tengo clarísimo que hoy no querría tener un hijo al que si le doy un cachete me pueda denunciar, o un hija que pueda volver a casa a la hora que le de la gana; tener relaciones sexuales a los 12 años alentada por sus maestros y que pueda abortar sin que yo me entere, lo que no es óbice para que según las circunstancias, tenga que correr con su manutención hasta pasados los 30 -referencias en el Supremo-.
En mi opinión, la solución del problema tiene tres fases; las dos primeras de tipo moral o filosófico. La primera consiste en decirle claramente a toda esta sociedad, que el estilo de vida que ha adoptado tiene sus contrapartidas y que estas no son nada agradables. Que el Estado del Bienestar que les habían prometido para su vejez es mentira y que seguramente moriremos hacinados y solos en algún "moridero" infecto, porque no habrá fondos para esas lujosas y confortables residencias de la Tercera Edad que habían supuesto en sus fantasías animadas de la Warner Brothers -La proyección de la película "Cuando el destino nos alcance" puede resultar muy adecuada para los seminarios correspondientes-.
La segunda es que se preparen para trabajar mientras literalmente les quede un aliento de vida útil. Finalmente, la tercera que creo que es la más interesante, consistiría en ingeniárnoslas al máximo para lo que se avecina. Quiero decir intentar construir soluciones con los mimbres que hay actualmente y con los que probablemente habrá en un próximo futuro. En este sentido, creo que la tecnología podría resultar de gran ayuda.
¡Ah! Por cierto: nunca me cansaré de repetir que la mayoría de la piedras que existen en la bóveda que nos cobija no están ahí por capricho o accidente. Nuestros ancestros las colocaron ahí y tienen un sentido oculto aunque ni ellos mismos fueran muy conscientes del porqué y a pesar de que los modernos aprendices de brujo insisten en quitarlas por inútiles y "casposas". Una de ellas es la prohibición de matrimonios homosexuales y otros tabúes que tan alegremente nos saltamos gracias a los profetas del progreso. Aunque eso... Sería otra historia.
Creo que ha llegado el momento de plantarnos aquellos que decidimos tener hijos. Sí, y por varios motivos:
1. dedicamos una gran parte de nuestros recursos afectivos, ocio, y económicos a nuestros hijos.
2. dedicamos gran parte de nuestra estabilidad emocional y salud física al cuidado y preparación de nuestros hijos
3. somos el centro de las críticas de los compañeros de trabajo porque cuando nuestro hijo está enfermo o tiene un problema, no nos podemos centrar en el tabajo como quienes no tienen hijos
4. somos castigados por nuestros jefes porque nuestros indicadores de rendimiento son un poco más bajos que los demás
5. si además eres una ama de casa, se tachan de "marujona", infravalorando tu valor como persona, tu trabajo de sostenimiento de la familia, y tu labor como educadora
6. quienes no tienen hijos SE VAN A APROVECHAR de nuestro esfuerzo cuando sean nuestros hijos quienes trabajen para mantener el sistema social.
7. quienes no tienen hijos se benficiarán lo mismo que quienes tenemos hijos, pero ellos NO dedicaron ningún esfuerzo en preparar estas condiciones.
Por lo tanto, los padres (incluyo a ambos progenitores) debemos plantarnos y pedir al Estado muchas compensaciones para el presente: horarios más cortos, subvenciones escolares (para educar correctamente a nuestros hijos), apoyo social con ayudas especiales (ayuda a domicilio, por ejemplo, de canguro), descuentos en programas vacacionales (sin necesidad de ser familia numerosa, aunque tampoco hay que quitar privilegios a quienes han decidido tener más de dos hijos, que su mérito tiene), descuentos en alimentación, en ropa, en libros, en....... O que nos descuenten mucho más en la declaración de la renta.
Qué comodos y cara dura son quienes "han optado por no tener hijos" y no se hacen solidarios con quienes "hemos optado por tener hijos".
Un saludo (y sepan que lo mejor que he hecho en mi vida por tener a mi hija)
Estimado Alex_Mac, en primer lugar agradecerle todo el tiempo y esfuerzo empleado en responder a mi pregunta, enfatizando el cambio de valores respecto a la sociedad de los 70 -yo nací en el 72- con nuestra actual sociedad.
Es cierto que han habido cambios radicales en nuestras prioridades, en nuestra individualidad y valores. Y hay que decir que hemos sido nosotros, por activa o pasiva, quienes hemos realizado o admitido dichos cambios.
Pero debe de estar de acuerdo que el nivel de vida también ha cambiado; ganaban menos, necesitaban menos, pero también el nivel de ingresos-gastos era diferente. Para no poner más ejemplos, la actual burbuja inmobiliaria.
Como ya ha dicho usted, las consecuencias de todo ello ni siquiera están empezando a verse. Y a ello hay que sumarle el actual nivel de paro entre los menores de 25 años, y el bajo interés en aprovechar el tiempo en formarse. Me permitirá recomendar una noticia de este diario electrónico, LD, que trata con estadísticas el tema.
¿No cree que sería interesante preparar un artículo con las bases o cambios que necesitaríamos como sociedad, para poder enmendar en un futuro nuestros errores?. No es necesario que contemple el plano inmediato, sino más bien un plan a medio-largo plazo. Personalmente, son los que más me interesan. Creo que estamos cansados de planes a 4 años.
Un saludo, y le animo a seguir informándonos sobre estos y otros temas.
Apreciado jorgevr:
Agradezco que le haya gustado el artículo.
En cuanto a la pregunta que hace, tras haber estudiado el asunto bastante y reflexionado mucho sobre él, creo que la razón principal de que tengamos tan poquísimos hijos es que, habiéndonos vuelto todos muy comodones gracias a la espectacular mejora del nivel de vida y de confort material de las últimas décadas, y no figurando ya entre nuestros valores prioritarios en la vida tener hijos, como sí lo era én la España tradicional, nos da pereza tenerlos, por su coste económico y el esfuerzo que entraña su crianza. Hay muchas más causas, incluidas causas políticas, por supuesto (casi todo se ha hecho mal en este campo desde hace varias décadas en la política, y más en los últimos tiempos), pero ésa es la esencial. Cambiaron nuestros valores desde mediados de los 70 (hacia mal, en este punto) y ahora somos demasiado comodones y poco esforzados / sacrificados. Y lo mismo pasa en casi todo el mundo desarrollado, aunque algo menos en países como EEUU y Francia. Nosotros estamos fatal en esto. Japón, Alemania, Italia, Rusia y muchos otros, también.
Ahora, para hombre y mujer, lo prioritario es hacer una carrera universitaria, asentarse profesionalmente, ganar dinero, empezar a comprar la casa, casarnos cuando ya lo tenemos claro-clarísimo... y cuando queremos tener hijos, a casi todos se nos ha pasado, o "semipasado" el arroz vital, porque somos ya muy mayores. Es el caso de muchísimos españoles sin hijos o con 1-2 menos de los que querrían: "se les pasó el arroz" biológico.
Nuestra infecundidad no se debe a la falta de riqueza de los españoles, sino en gran medida justamente a lo contrario (nuestros antepasados eran mucho más pobres en media, pero tenían muchos más hijos. Y quienes más hijos tienen aquí y ahora son los residentes en España más pobres: los inmigrantes). Nuestro nivel de vida nos ha hecho mucho más blanditos y poco sacrificados, y ha favorecido que muchos hayan perdido los valores religiosos de antaño, que también tenían entre sus mandatos esenciales la procreación. Por supuesto, no se trata de renunciar al progreso económico, sino de que éste sea compatible con que tengamos hijos suficientes, al menos, para que haya relevo generacional (para ello, actualmente, necesitaríamos un 50% más de nacimientos al año en España).
De hecho, menciona Vd. el caso de Alemania. Justamente ahí, con mayor nivel de vida que nosotros y casas más baratas, tienen tan pocos hijos como nosotros, desde hace 10 o 15 años antes que nosotros. Alemania tiene un problema demográfico pavoroso, aún peor que el nuestro hoy por hoy. Todos los años, Alemania pierde población, la cual es la más envejecida de Europa occidental junto con la de Italia, otro país que está fatal en demografía. Por cierto, una de las razones de que las casas sean más baratas en Alemania es justamente que allí cada año hay menos población y, sobre todo, cada vez hay menos personas con edades entre 25 y 40 años, que son las que tiran del mercado de la primera vivienda. Sobran casas, y las que hay no suben de precio o tienden a bajar con los años.
Y lo mismo va a suceder en España, pues cada vez habrá menos jóvenes (ya hay bastantes menos que hace sólo 10 - 15 años, y cada año la cosa irá a peor, por los hijos que no hemos tenido desde hace 30 años). Es lo que nos faltaba, tras la burbuja inmobiliaria y el famoso stock de pisos sin vender de 600.000 - 1.000.000 de viviendas: que cada año habrá menos compradores potenciales por nuestro invieron demográfico. Pero es lo que hemos provocado no teniendo hijos, y cuanto antes nos demos cuenta de que los niños no son algo prescindible o secundario, sino ESENCIAL Y PRIORITARIO (y además, aunque cuesta mucho dinero y esfuerzo criarlos, los hijos son algo MARAVILLOSO), antes empezaremos a enderezar el gigantesco entuero demográfico en que nos hemos metido.
Don Alejandro, un buen artículo, aunque con muchas cifras.
Sería interesante conocer su opinión respecto a cual debería ser, en términos sociales, económicos, seguridad jurídica y de valores, la situación ideal para que los ciudadanos fuéramos capaces de formar familias y procrear.
Se lo pregunto ya que, como muchos españoles, no creo que se den las condiciones idóneas, en lo que se refiere a los términos anteriormente nombrados.
Por ponerle un ejemplo, si yo viviera en Alemania, la vivienda costaría la mitad (alquiler), la gran mayoría de productos son algo más barato, salvo alcohol y tabaco, y los sueldos doblan el neto que cobramos aquí.
Más ejemplos; si revisa su última factura de suministro eléctrico, podrá comprobar cuanto se destina a impuestos. En la mía, los impuestos superan al consumo y servicio. ¿Cuanto se cobra en Alemania?.
La familia es defendida como un pilar de la sociedad, cuidan sus valores y la excelencia en estudios y trabajo. Aquí no, es más, se castiga y se discrimina a los que sobresalen sobre otros por propios méritos.
Si los españoles viviéramos con las mismas condiciones que los alemanes o franceses, no tendríamos 2 hijos, tendríamos 3 o 4, se lo aseguro.
Lo que ahora vivimos, y el futuro que nos espera, son las consecuencias de políticas erróneas en todos los campos, desde educación hasta economía. Incluyo al cachondeo de las 17 políticas diferentes.
El futuro es irse a Europa e iniciar una nueva vida. El pasado el Reino Cacique de España.
Yo no traigo al mundo esclavos para pagar impuestos, don Alejandro, traigo hombres y mujeres libres, para que disfruten de la vida, aprendan sus lecciones y lleguen a ser mejores que yo. Quiero darles un futuro, y en España no lo hay.
A menos que "corramos a gorrazos" a nuestra actual casta dirigente, claro está.
Si nos fiamos de los datos demográficos de varios países, como España, podemos comprobar fehacientemente que no es verdad eso de que nuestro planeta está superpoblado. Ni siquiera Africa.
Japón, décimo país en densidad de población, cuenta con una densidad demográfica media de unos 340 habitantes por kilómetro cuadrado.
En cambio Barcelona tiene una media de 16.000 habitantes, y Madrid unos 6.000, cifras de 2005.
Un mapa demográfico de España demuestra que hay espacio de sobra para más de 50 veces la actual población.
No sobran seres humanos, faltan normas que permitan la libertad y el derecho al suelo.