don Emilio, me temo que la tasa Tobin, no pueda esperar y la reforma laboral duerma el sueño de los justos ... sobre todo después de haber sido hecha (vamos que si se hace no pasará de faena de aliño para aparentar maneras)
Este tío que vivió la revuelta sindical posterior a la reformita laboral de Aznar desde el gobierno, debió interiorizar el mensaje y huye como gato escaldado de todo intento de contrariar a los sindicatos, lo que por otra parte va como un guante con su forma de ser.
Estoy de acuerdo con que “lo que nos importa a los españoles es que no se pierda ni un puesto de trabajo más” pero tengo mis dudas acerca de “a causa de la rigidez del mercado laboral”. Eso de la rigidez del mercado laboral (será para los que lleven trabajando veinte años) convendría explicarlo bien para no caer en discursos circulares; tengo una amiga que en los últimos años ha sido contratada tantas veces por días (e incluso por horas) que está a punto de perder la fe también en la flexibilidad laboral.
Ojalá me equivoque pero la reforma del mercado laboral no va a servir para nada porque básicamente se contrata cuando hay actividad económica. Aunque no es el caso de este artículo (es de agradecer) muchos de los analistas suelen repetir que la “rigidez” del mercado laboral es estructural y culpan de ello a la herencia Mussoliniana del franquismo con su sindicato vertical al frente pero esto no es más que lanzar balones fuera para ocultar carencias más recientes ya que Franco falleció en 1975, la gran mayoría de las empresas públicas que creó están privatizadas y han pasado muchas reformas laborales (básicamente repitiendo moderación salarial, contratos temporales y despido barato) en los últimos años (por ejemplo 1979, 1980, 1981, 1983, 1984, 1992, 1994, 1996, 1997, 2001, 2002, 2006, 2009, 2010 y 2011) que finalmente no lograron conseguir la mayor parte de sus objetivos de fomento del empleo (aunque parcialmente lo hizo la del 97). Me temo que los legisladores, los sindicatos y la patronal son conscientes de sus (fracasadas) experiencias pasadas y no saben (o no tienen suficiente voluntad o paciencia para) desafiar al desempleo y la temporalidad.
Saludos.