Menú

'El País' mezcla churras con merinas para hablar de ricos y desigualdad

Las distintas interpretaciones sobre los informes dedicados a las grandes fortunas han alimentado un encendido debate sobre la desigualdad.

Las distintas interpretaciones sobre los informes dedicados a las grandes fortunas han alimentado un encendido debate sobre la desigualdad.
Archivo

El número de españoles con grandes patrimonios se incrementó un 10% entre 2013 y 2014, pasando de 161.000 a 178.000 personas. Así se desprende del nuevo informe que han publicado Capgemini y RBC Wealth Management. Las 178.000 grandes fortunas de 2014 contrastan con las 127.000 que se registraban en el año 2008. Estaríamos, por tanto, ante un aumento del 40% que algunos medios de comunicación han acogido con escándalo e indignación.

En realidad, una interpretación fría de los datos muestra que lo ocurrido en España es algo bastante normal. De entrada, es importante destacar que el informe de Capgemini y RBC Wealth Management no mide los ingresos anuales, sino que se centra en valorar el patrimonio de los ciudadanos más afortunados. Por tanto, más que analizar las rentas percibidas por este colectivo a lo largo del año, lo que hace este estudio es calcular el valor de sus activos financieros o inmobiliarios.

Es por eso que la tendencia creciente en el número de millonarios no debería sorprendernos. Al fin y al cabo, la Bolsa española acumula ya varios años al alza, como muestra un vistazo a los tres últimos años del Ibex 35:

Por otro lado, aunque los precios inmobiliarios han acumulado años a la baja desde el estallido de la crisis, el estancamiento observado en los últimos dos ejercicios también ayuda a que, a la hora de valorar la riqueza de las grandes fortunas, la tendencia sea positiva.

En cualquier caso, esta situación también se da si analizamos a todos los hogares españoles en vez de ceñirnos a los más ricos. Así, según ha explicado el Banco de España, la riqueza neta de las familias acumula un crecimiento del 22% entre 2012 y 2014, superando ya el billón de euros y alcanzando máximos no vistos desde 2006.

¿Significa eso que los españoles estén ganando mucho más dinero? No: lo que apunta es que el valor de sus patrimonios ha dejado de deteriorarse y ha entrado en una fase de recuperación que se explica por el menor endeudamiento pero también por aspectos antes mencionados como la apreciación de la bolsa o el fin de las profundas caídas observadas en los precios de los activos inmobiliarios.

Algo parecido podría decirse de los millonarios. Más que "aumentar un 40%" como consecuencia de una explosión en sus ingresos, estamos ante el efecto estadístico derivado de una recuperación de los mercados y del ladrillo.

El País se equivoca

Algunos medios de comunicación no solamente se han olvidado de explicar todo lo anterior a sus lectores, sino que incluso han aprovechado el informe de Capgemini y RBC Wealth Management para hablar de un aumento de la desigualdad.

Es el caso del diario El País, que acompañaba su reseña del estudio con un párrafo en el que afirmaba que el documento en cuestión "confirma el aumento de la desigualdad en España, en línea con los últimos informes publicados".

En realidad, los cálculos de Capgemini y RBC Wealth Management se ciñen únicamente a la fortuna de los grandes patrimonios, por lo que no suponen una fuente comparable con el resto de ciudadanos. Además, aunque el informe se centra en valorar grandes patrimonios, El País liga su comentario a los estudios sobre las diferencias salariales. Por usar una expresión castiza, esto es mezclar churras con merinas.

La comparación que sí podría haber venido al caso pasaría por analizar la desigualdad de riqueza y no de salarios. Sin embargo, la OCDE viene de publicar un informe que aborda precisamente este punto, concluyendo que España es uno de los países desarrollados en los que las diferencias patrimoniales entre sus ciudadanos son más pequeñas.

Por otro lado, también es importante explicar que, al contrario de lo que leemos en El País, los últimos informes publicados sobre la desigualdad salarial no hablan de un aumento de la misma, sino de una reducción. De hecho, el coeficiente Gini (indicador que mide esta cuestión) bajó entre 2012 y 2013 desde los 34,2 hasta los 33,7 puntos. Cabe recordar que con Rodríguez Zapatero como Presidente pasó todo lo contrario: el socialista heredó un Gini de 31 puntos y lo dejó en 34.

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios