2001 no está siendo negativo para todos los inversores que colocan su dinero en Bolsa. No lo es ni para aquellos que incluyeron en sus carteras alguna constructora ni para aquellos que compraron coches. Desde el pasado dos de enero, DaimlerChrysler ha subido más de un 28%, BMW un 12%, Peugeot más de un 30% y General Motors más de un 22%. ¿Por qué los coches cotizan al alza en bolsa?
Por varios motivos. Primero, porque en un contexto de desaceleración económica las empresas siguen vendiendo coches. Si miramos a empresas concretas tenemos que las ventas de BMW, por ejemplo, se incrementan en los seis primeros meses del año un 9% ; General Motors eleva su beneficio por acción entre enero-junio de este año a 1,26 dólares, muy por encima de los 1,14 dólares previstos.
Segundo porque el sector de la automoción había descontado un escenario tremendamente negativo para este año 2001 después de que 2000 fuera nefasto; el pasado ejercicio en nuestro país se saldó con una caída de las matriculaciones del 1,8%, nada que ver con el buen comportamiento registrado por el sector en la primera mitad de este año. Según ANFAC, se han matriculado más de 760.300 automóviles desde enero, un 1,4% más que en todo el ejercicio pasado. El sector del automóvil se ha encontrado con una sorpresa este año debido a que el consumo doméstico, de momento, se mantiene firme. Habrá que ver si en el futuro el deterioro del mercado laboral y la caída de las bolsas permite que el consumo siga aguantando el chaparrón.
A estos dos factores hemos de añadir el trasvase de dinero procedente de las TMT –valores de Internet, medios y telecomunicaciones– y el permanente rumor de movimientos de concentración; los expertos apuntan que la globalización del sector obligará a que sólo queden cinco o seis compañías en los próximos años. De los seis fabricantes de la zona euro que cotizan, las preferencias de los expertos pasan por aquellos que tienen una historia positiva que contar. Entre las favoritas está BMW porque es capaz de incrementar ventas en un mercado como el estadounidense que está en plena recesión. Favorita también es Peugeot porque en el mercado se habla de un posible acercamiento a Renault; juntas podrían convertirse en uno de los grandes actores del mercado de la automoción a nivel mundial.
Cuidado, sin embargo, con Volkswagen por los ajustados márgenes con los que trabaja y su fuerte exposición a Latinoamérica. Y, prudencia, también con DaimlerChrysler debido a que hablamos de una fusión de dos culturas empresariales bien distintas, una europea y otra estadounidenses.
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