Dentro de su cruzada contra el "sexismo" en los juguetes, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, firmó este miércoles un acuerdo con la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) y Autocontrol para transformar los anuncios de juguetes y ajustarlos a la perspectiva del ministerio. El nuevo código, que sustituye al de 2015, incluye 64 "normas éticas" sobre los anuncios destinados a menores de 15 años.
Las reglas aluden a aspectos como la seguridad, la legalidad y la "educación y valores cívicos". Dentro de este apartado, se especifica que los anuncios no fomentarán "la discriminación por cualquier motivo", citando la etnia, discapacidad o sexo. Tampoco incluirán escenas sexuales, "ni caracterización de los menores con connotación sexual". Sobre esto último, se especifica que se evitará que ofrezcan "una imagen sexualizada de las niñas", "vestidas y maquilladas como mujeres adultas" o "con el mandato de gustar al sexo masculino".
Además, los anuncios evitarán "los sesgos de género", fomentando "una imagen plural e igualitaria de los roles que se puedan adoptar" para favorecer, dicen, "su libre elección de juguetes". Con este fin, quedarán prohibidos los anuncios en que aparezcan sólo niños, o sólo niñas: se evitará, dice, "la asociación exclusiva de juguetes que reproduzcan roles de cuidado, trabajo doméstico y belleza personal" con las niñas, y la "identificación exclusiva de juguetes que potencien la experimentación, la actividad física o el desarrollo tecnológico con niños".
El reglamento pide evitar "la contraposición en una misma campaña" de "colores tradicionalmente asignados a uno u otro género" (citan los clásicos azul y rosa pero también los colores "pastel" frente a colores "oscuros"). Además, "se tratará de utilizar un lenguaje inclusivo" y se promoverá "la diversidad y la igualdad de género" en las infografías. Según el código, los nuevos anuncios "tratará de presentar modelos positivos a seguir, estimulando un consumo saludable, responsable y sostenible, siempre que sea posible". A los anunciantes se les recomienda incorporar "diversidad" en sus spots.
Entre las decenas de especificaciones, se incluyen normas como la obligatoriedad de que aparezca el "equipo de seguridad" en los anuncios de prácticas deportivas como ciclismo o monopatín o la prohibición de que los anuncios inciten "a entrar en lugares extraños o a conversar con desconocidos".
Queda prohibido que anuncien juguetes "personajes que gocen de polaridad entre el público infantil". Citan como ejemplo "personajes reales o ficticios de películas o series", presentadores, cantantes, deportistas… También se prohíbe que los anuncios sugieran "que los padres y madres o las personas adultas que ofrecen un juguete son mejores o más generosos que quienes no lo hacen".
A normas ya conocidas como la necesidad de especificar si se requieren pilas o montaje, se añaden otras. La ficción animada sólo podrá usarse "en la medida en que no induzcan a error y permitan a los niños conocer sus verdaderas prestaciones y características". Además, en los anuncios en que un juguete "estático" (un muñeco de acción, por ejemplo) aparezca en movimiento, "será necesario adoptar las cautelas necesarias para que resulte claramente apreciable que tal movimiento se produce por el aporte mecánico de una mano o similar".
También queda prohibido "confundir a los menores sobre supuestos beneficios" del juguete como "la adquisición de fortaleza, estatus, prestigio, popularidad, crecimiento, habilidad e inteligencia". En otro punto, se especifica que "las presentaciones y el uso de un producto deben mostrarse o describirse de manera que puedan ser repetidos por el niño al que va destinado el producto, fomentando para ello la creatividad, la capacidad resolutiva, el desarrollo físico y/o intelectual, la sociabilidad o la empatía".
El extenso código especifica que las empresas jugueteras adheridas deben "enviar al Gabinete Técnico de Autocontrol, para su examen previo" todos los anuncioes de juguetes. Entrará en vigor el próximo 1 de diciembre, es decir, para la campaña de navidad de 2022. Los anuncios "ya emitidos" antes de esa fecha podrán verse pero tendrán que "adaptarse a las nuevas disposiciones deontológicas" antes del 1 de diciembre de 2023.