Importantes medidas fiscales y regulatorias las que acaba de anunciar la Junta de Andalucía. Como avanzó Libertad Digital, el gobierno que preside Juanma Moreno prepara una nueva reforma del marco impositivo y regulatorio andaluz con la que pretende seguir recorriendo el camino que emprendió hace décadas la Comunidad de Madrid. Y es que el barón autonómico tiene claro que debe emular el modelo de simplicidad y eficiencia en materia tributaria y regulatoria.
Empecemos por los impuestos. La rebaja de impuestos que ha anunciado Moreno tendrá un impacto notable, puesto que devolverá más de 360 millones de euros a los contribuyentes de la región. Dicho ahorro tributario se reparte en tres reformas: en primer lugar, se bonificará al 100% el Impuesto sobre el Patrimonio; en segundo lugar, se deflactará un 4,3% la tarifa del IRPF y los mínimos personales y familiares aplicados a todos aquellos contribuyentes que declaran unos ingresos de menos de 40.000 euros; en tercer lugar, se eliminará el canon del agua que pagan familias y pymes.
Desde la Junta de Andalucía explican que las cinco rebajas de impuestos aprobadas hasta ahora han supuesto un ahorro fiscal de 540 millones de euros. Si a esa cifra se le suman los 360 millones de la reforma que acaba de anunciar Juanma Moreno, encontramos que los contribuyentes andaluces acabarán pagando 900 millones menos al fisco cada año, un importante alivio con respecto a los años de gobierno del PSOE, cuando los tributos exigidos por Hacienda eran tan elevados que las deudas con la Agencia Tributaria andaluza llegaron a superar los 4.665 millones de euros.
Hay, eso sí, un importante "efecto Laffer" detrás de estas medidas, puesto que la mejora de la actividad económica propiciada por la reducción de las cargas tributarias ha terminado financiando un aumento de la recaudación. Este año, sin ir más lejos, las rebajas de impuestos no han impedido que los ingresos obtenidos en el primer semestre hayan aumentado un 6,2%, mientras que en el IRPF autonómico se produjo una mejora del 7,2%. No es un episodio aislado 2021, los ingresos tributarios de la Junta ya habían subido otro 4,7%.
Refiriéndose al fenómeno lafferiano, Moreno ha aportado cifras referidas al Impuesto sobre el Patrimonio. Según explicó el mandatario andaluz, diez de los veinte principales contribuyentes de la región se trasladaron a otras comunidades en 2020, lo que supuso la pérdida de 18 millones de euros, como resultado de los ingresos que se dejaron de obtener en dicho gravamen y el IRPF. En caso de que estos contribuyentes vuelvan a Andalucía, se recuperarían 14 de esos 18 millones de recaudación.
Las 6 rebajas de impuestos
A lo largo de la anterior legislatura, la Junta de Andalucía aprobó cinco rebajas de impuestos:
- El Decreto ley 1/2019, de 9 de abril, contemplaba la rebaja de la tarifa del IRPF, el establecimiento de tipos reducidos en los Impuestos de Transmisiones Patrimoniales y de Actos Jurídicos Documentados y la bonificación en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
- La Ley 6/2019, de 19 de diciembre, del Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para el año 2020, que recogía nuevos beneficios fiscales tanto en los Impuestos de Transmisiones Patrimoniales y de Actos Jurídicos Documentados como en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
- La Ley 3/2020, de 28 de diciembre, del Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para el año 2021, que incluía una reducción en la tarifa aplicada en el Impuesto sobre el Patrimonio.
- El Decreto ley 7/2021, de 27 de abril, mediante el cual se crearon nuevos tipos generales más reducidos en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados.
- La Ley 5/2021, de 20 de octubre, de Tributos Cedidos de la Comunidad Autónoma de Andalucía, que incluyeron numerosas mejoras en los tramos y las deducciones y aplicables en el IRPF. Además, se ampliaron los descuentos en los Impuestos de Transmisiones Patrimoniales y de Actos Jurídicos Documentados y el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Ahora, con la nueva ronda de rebajas tributarias que anuncia Moreno, la Junta pone encima de la mesa la sexta etapa en su senda de reducción de la presión fiscal autonómica, en línea con la "bajada masiva de impuestos" que prometió el dirigente popular tras alcanzar el gobierno regional y poner fin a cuarenta años de socialismo.
Más desregulación
Pero el gobierno andaluz también ha anunciado que pondrá en marcha un cuarto paquete de medidas de desregulación. El primero llegó en 2019 y agilizó la declaración de proyectos estratégicos, mientras que el segundo data de 2020 y agilizó un centenar de procedimientos a base de revisar veintiuna leyes y seis decretos.
Más recientemente, el curso 2021 se cerró con un Decreto-ley que incluyó 300 medidas de simplificación, mejorando o derogando 80 normas autonómicas. Y ahora, Moreno pone encima de la mesa otra ronda de medidas de desregulación, que se plasmará con una Ley de Simplificación Administrativa con la que la Junta facilitará la gestión de los fondos europeos y aliviará otras cargas regulatorias aplicadas sobre la actividad empresarial.
