La número 2 de Irene Montero, Ángela Rodríguez Pam ha sido la encargada este martes de presentar los presupuestos del Ministerio de Igualdad en el Congreso de los Diputados, unas cuentas que, tal y como avanzó el Gobierno, suben un 9% respecto al año pasado, alcanzado la cifra histórica de 573 millones de euros.
"Frente a una crisis, a tirar la casa por la ventana", ha resumido la diputada de Vox Carla Toscano, para la que los presupuestos se resumen en tres palabras: "Propaganda, adoctrinamiento y privilegios". En este sentido, Toscano ha pedido "a los españoles que están pasando momentos muy malos, que no pueden pagar la factura de la luz, que no tienen trabajo, a los que les cuesta mucho llegar a fin de mes o pagar el colegio a sus hijos, que reflexionen sobre si es correcto y moral que vayan 573 millones destinados a la promoción y a la imposición de la ideología de género".
Chiringuitos y adoctrinamiento
Entre las diferentes partidas, la portavoz de Vox en la comisión de Igualdad ha destacado la destinada al Instituto de las Mujeres, al que van dirigidos 27 millones de euros: "Quiero señalar que más del 22% del presupuesto se va a gastos de personal y más del 37% se va a gastos corrientes en bienes y servicios. Es decir, el 60% del presupuesto se va en mantener el chiringuito y la otra parte se va, por ejemplo, a fomentar el aborto y la propaganda feminista".
Tampoco le convence el dinero destinado a la igualdad de trato y diversidad: "7 millones que destinan al adoctrinamiento de profesores, al adoctrinamiento de niños, a la elaboración de recursos para hacer más propaganda de la ideología de género o al fomento y la inserción de personas LGTB… O sea, a darles privilegios para trabajar".
La fallida lucha contra la violencia de género
La partida más abultada, no obstante, es la dirigida a luchar contra la violencia de género: 320 millones de euros más otros 30 adicionales provenientes de fondos europeos. "Cada año aumenta más el presupuesto y las cifras siguen igual. No funciona. Aquí falla algo. Tal vez deberían reflexionar", le ha espetado Toscano, a la que se ha sumado la portavoz del PP en la comisión, María Auxiliadora Pérez Díaz.
"Es una satisfacción ver que incrementan el presupuesto destinado a violencia de género, pero deberían dedicarlo a los fines para los que se previó y no para lo que a ustedes les parece más interesante, que suele ser una acción que suele ser contratada por una de sus empresas amigas -le ha reprochado la diputada popular-. Solo por poner algún ejemplo… ¿Dónde están las inversiones que deberían haberse destinado a mejorar las instalaciones de los juzgados para impedir que víctima y maltratador tengan que verse las caras? ¿Dónde están las mejoras a los equipos psicosociales que atienden a las víctimas en el ámbito judicial?".
En esta línea, le ha reprochado también el aumento de las partidas destinadas personal, los casi 12 millones de euros dedicados a "estudios y trabajos técnicos" y los otros 17 que irán a subvenciones nominativas: "Subvenciones con nombres y apellidos, con las que van a premiar a muchas entidades afines y amigas, y que en algunos casos quizá serán pagos por los servicios prestados".
La decepción de las mujeres
Con todo, la diputada popular ha advertido de que cada vez son más las mujeres que piensan que el Ministerio de Igualdad no responde a sus necesidades, ya que "no han visto mejorar sus vidas en estos años a pesar del aumento de los presupuestos", sino que "siguen retrocediendo económica, laboral y socialmente".
Como muestra, ha recordado que 6 de cada 10 parados son mujeres, que la brecha en el ámbito de la conciliación ha seguido aumentando y que "mientras este Gobierno les da 100 euros para la crianza de sus hijos de 0 a 3 años, les endosa una deuda de 6.000 euros a ella y otros 6.000 a su hijo". "Y estos son los presupuestos feministas de los que tanto alardean", ha ironizado.
La portavoz del PP, sin embargo, ha celebrado que "la fiesta toca a su fin", porque los españoles, dice, se han dado cuenta de que lo único que han hecho es dedicarse "al activismo de alto standing": "Las mujeres españolas, las mujeres reales, las mujeres de carne y hueso se merecen más y mejores políticas públicas. Se merecen políticos responsables que generen consenso, no activistas de coche oficial que crispan y generan conflictos y divisiones en la lucha por la igualdad entre mujeres y hombres".