La deuda de las corporaciones locales ha crecido por vez primera en una década. Los datos que presentó en 2022 el ministerio de Hacienda elevan los pasivos de los ayuntamientos, los cabildos y las diputaciones a 22.000 millones de euros. Los datos de cierre de 2021 reflejan un aumento del endeudamiento de 122 millones de euros y, si bien la cifra no es significativa, sí resulta problemático comprobar que se ha detenido la senda de reducción del endeudamiento municipal en un contexto en el que la recaudación fiscal va en aumento.
La ciudad de Madrid mejoró sus datos un 13,9% a lo largo de 2021, lo que contribuyó a dejar su deuda total en 1.679 millones de euros. Sin embargo, a falta de datos definitivos para el año 2022, el último boletín publicado por el consistorio que dirige José Luis Martínez Almeida refleja un cambio a peor en los nueve primeros meses de 2022.
Así, mientras que en septiembre de 2021 se registraba un endeudamiento de 1.709 millones de euros, el noveno mes de 2022 se cerró con un pasivo total de 1.983 millones. La subida, de 274 millones, supone un incremento del 16% en el pasivo municipal y revierte por completo toda la mejora alcanzada en 2021, a la espera eso sí de que se confirme el comportamiento de la deuda en el último trimestre del ejercicio.
El pasado diciembre, el gobierno de Almeida sacó adelante sus presupuestos con el rechazo del PSOE y Más Madrid, pero también de Vox, que había sido hasta entonces el principal apoyo de PP y Cs. Sin embargo, los concejales afines a Manuela Carmena que se han desmarcado del grupo de Más Madrid y se han integrado en el grupo mixto bajo el nombre de Recupera Madrid prestaron sus votos al gobierno para respaldar las cuentas.
Esas mismas cuentas serán prorrogadas en 2023, puesto que Vox se ha negado a respaldar al gobierno local y los concejales de Recupera Madrid tampoco han mostrado predisposición. Esta circunstancia podría contribuir a moderar el gasto, ya que el presupuesto será prorrogado y el gasto no financiero se reducirá en 259 millones de euros, hasta los 5.282 millones. A cambio, no habrá nuevas rebajas de impuestos. Sin embargo, el saldo final también cuelga de los gastos que realice finalmente el gobierno local.
Las explicaciones de Cibeles
Desde Cibeles admiten que la deuda ha subido entre los meses de septiembre de 2021 y 2022, pero añaden a renglón seguido que en el mes de octubre se produjo una amortización de 200 millones de euros y apuntan que el saldo final del ejercicio se cerrará con un descenso testimonial de los pasivos municipales estimado en apenas 20 millones. El consistorio se justifica aludiendo a "la invasión rusa de Ucrania", "la mitigación de los efectos de la pandemia", "el impacto de Filomena" o "la sentencia del TC sobre la plusvalía municipal". También añade Cibeles que "la deuda del Estado supera la cifra récord de 1,5 billones de euros".
Entre 2013 y 2014, la reducción de la deuda fue de 1.100 millones. Entre 2014 y 2015, las obligaciones de la corporación cayeron en 1.170 millones. De 2015 a 2016, los pasivos se recortaron en 900 millones. Las medidas de ahorro implementadas por la entonces alcaldesa, Ana Botella, propiciaron esa acelerada caída del endeudamiento. En los años siguientes, con Manuela Carmena en Cibeles, la caída empieza a moderarse, pero siguió moviéndose en cifras significativas: 450 millones menos entre 2016 y 2017, 660 millones menos de 2017 a 2018 o 530 millones entre 2018 y 2019. Bajo gobierno de Almeida, se constata un ritmo de descenso de la deuda más suave: 280 millones de 2019 a 2020, 270 millones de 2020 a 2021 y una previsión de 20 millones en el saldo comparado de 2021 y 2022. Así, mientras que el descenso medio en los ocho años anteriores fue de 670 millones, la caída en 2022 sería apenas el 3% de esta cifra. Dicho de otro modo, la reducción de la deuda municipal en 2022 habrá sido un 97% inferior al promedio observado entre 2013 y 2021.