Las ventas de las grandes empresas no consiguieron mantener un ritmo similar al del avance de la inflación ya en 2022. Cerraron el año pasado con un auge del 5,9% frente a una inflación media del 8,4%. Y el paso del año ha profundizado esta tendencia: en lo que va de 2023, las ventas de las grandes empresas crecen un 2,8% cuando la previsión de IPC medio anual ronda el 3,9%, según Funcas.
Se trata de los datos oficiales de la Agencia Tributaria recogidos en el indicador de ventas de grandes empresas. Pero si la tendencia anual parece clara, la trimestral y mensual es más evidente. Frente a crecimientos trimestrales superiores al 5% en 2023, el segundo trimestre de 2023 ha concluido con un leve avance interanual de un 1,6%. Y todo ello con los precios en continua subida. Y si se observa el ritmo mes a mes, se puede detectar que en abril se pasó de números negros a rojos: tres meses consecutivos mantienen signo negativo mostrando caídas en las ventas de un punto en abril, medio punto en mayo y 0,9 puntos en junio.
El propio informe de mayo de la Agencia Tributaria reconocía ya que "las ventas totales de las grandes empresas, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, se incrementaron en mayo un 1,1%, tasa similar a la del mes pasado y que supone una prolongación de la moderación en el crecimiento que se viene observando desde principios de año". El informe añade que, además, "en mayo, el repunte de las ventas interiores se vio frenado por los negativos resultados de las exportaciones".
Los informes de la Agencia Tributaria, de hecho, recogieron en mayo la siguiente explicación: "Las exportaciones registraron un descenso del 2,3% en mayo, el primer dato negativo desde febrero de 2021. Atendiendo a su destino, las dirigidas a la UE presentaron todavía un tímido avance (0,4%), frente al retroceso que experimentaron las ventas destinadas a terceros países (-5,2%)".
Además, ese mismo informe aclaró que "el crecimiento del número de perceptores de rendimientos del trabajo, indicador fiscal del empleo asalariado, tuvo un comportamiento algo menos dinámico (3,4% en mayo y 3,6% de abril)". Es más, "como se viene indicando en informes anteriores, esta evolución es coherente con una progresiva incorporación de las revisiones salariales, que, con menor intensidad y cierto rezago, responden a las subidas en el nivel general de precios de los dos últimos años".
El informe de la Agencia Tributaria de junio confirma la tendencia. "Las ventas interiores se incrementaron un 2% en junio, ligeramente por debajo del dato de mayo". Y es que, aunque "las ventas de consumo repuntaron ostensiblemente, alcanzando una tasa del 5,2%, mientras, las ventas de inversión se moderaron hasta el 13,8%".
En junio, sin embargo, "las exportaciones recuperaron el terreno positivo, incrementándose un 3,1% en junio. El repunte se produjo gracias a la evolución de las ventas dirigidas a la UE, que se expandieron un 9,4%, frente al retroceso que siguieron experimentando las destinadas a terceros países (-3,4%)". Pese a lo cual, el dato intermensual de junio marcó un -0,9% global.