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La marcha de Nadia Calviño al Banco Europeo de Inversiones da oxígeno a Yolanda Díaz en su semana más horrible

La vicepresidenta respira aliviada por la salida de la ministra de Economía con la que mantenía un choque permanente.

La vicepresidenta respira aliviada por la salida de la ministra de Economía con la que mantenía un choque permanente.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la de Trabajo, Yolanda Díaz, y la de Economía, Nadia Calviño, durante la celebración del Día de la Constitución. | EFE

La salida de Nadia Calviño del Gobierno para presidir el Banco Europeo de Inversiones supone un motivo de alegría para la vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz. El permanente choque entre ambas había escalado a cotas nunca vistas en las últimas semanas y hacía irreconciliable su relación en el Consejo de Ministros. La semana en la que la líder de Sumar ha tenido que afrontar la ruptura con Podemos, la marcha de Calviño le permite coger algo aire.

A la espera de conocer quién sustituirá a Calviño, con José Luis Escrivá y María Jesús Montero como favoritos, Díaz ha acogido la salida de la ministra con gran entusiasmo, siendo una de las primeras en felicitarla, casi a la par que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Es un orgullo para España que por primera vez una mujer alcance esa importante responsabilidad", escribía en la red social X al poco de darse a conocer el nombramiento.

El alcance y cuantía del subsidio de desempleo había llevado a Calviño y Díaz a protagonizar en los últimos días un fuerte encontronazo, con acusaciones cruzadas de filtrar información a la prensa, además de duros reproches ideológicos. La líder de Sumar llegó a comprara a su compañera de Gobierno con el PP por querer rebajar la paga actual a 440 euros, mientras que Díaz pretendía subirla hasta los 660, además de ampliar el número de beneficiados.

Este era el primer enfrentamiento que ambas protagonizaban en la legislatura, cuando el Gobierno apenas acaba de constituirse, lo que avanzaba una situación muy difícil de no ser por el nombramiento de Calviño para presidir el BEI. Sin embargo, el nuevo choque se suma a una larga ristra de encontronazos entre ambas en los que, paradójicamente, Díaz siempre acaba imponiendo su criterio a Sánchez, necesitado de los votos de Sumar, antes Podemos, para seguir en La Moncloa.

La propuesta de Yolanda Díaz para reducir la jornada laboral, la ley Ryder, el límite al precio del alquiler y, sobre todo, la reforma laboral, son sólo algunos ejemplos de las disputas que se han vivido en el seno del Consejo de Ministros, por el choque provocado entre ambos departamentos. Calviño sólo consiguió rebajar algo las expectativas de Podemos en la famosa reforma laboral, que a punto estuvo de no ser aprobada en el Congreso.

La disputa ha sido tan pública que ha permitido a ambas marcar perfil propio dentro del Gobierno, además de brindar la oportunidad a PSOE y Podemos (ahora Sumar) de simular distancia ideológica en cuestiones económicas. Queda ahora por conocer qué opinará Yolanda Díaz de las intenciones de Pedro Sánchez de dar marcha atrás con el impuestazo a las eléctricas ante la amenaza de salir del país y perjudicar con ello el empleo. Un asunto por el que el nuevo titular de Economía podría acabar heredando los enfrentamientos que Calviño mantuvo con Díaz.

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