La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha autorizado la compra por parte del fondo británico Zegona del negocio de Vodafone en España "sin compromisos", una operación valorada en 5.000 millones de euros, según ha informado el regulador en un comunicado. "La operación consiste en la adquisición por parte de Zegona Communications (Zegona) del control exclusivo de Vodafone Holdings Europe (Vodafone), lo que a su vez le permite adquirir el control de sus respectivas filiales: Vodafone España, Vodafone ONO, Vodafone Servicios y Vodafone Energía", ha detallado la CNMC.
En ese sentido, el regulador considera que las actividades de las dos compañías no se solapan "ni horizontal ni verticalmente" en España dado que "Zegona no está actualmente presente en el mercado" nacional. "Por ello, la operación de concentración no modifica significativamente la estructura de los mercados afectados, produciéndose solamente un cambio en la titularidad del control de Vodafone en España", ha agregado.
De este modo, el cierre de la operación queda ahora supeditado a la autorización por parte del Gobierno. A través del Consejo de Ministros por un lado y, por el otro, del Ministerio de Transformación Digital en relación con el traspaso de concesiones relevantes para el uso privativo del dominio público radioeléctrico.
Proceso de autorización
En concreto, además de por la CNMC, la adquisición por parte de Zegona del negocio de Vodafone en España ya ha sido aprobada por sus accionistas y también ha superado el trámite relativo a la normativa de la Unión Europea (UE) sobre "subvenciones extranjeras que distorsionan el mercado interior", decisión esta última que se dio a conocer este pasado miércoles, según la documentación a la que tuvo acceso Europa Press. Sin embargo, el fondo británico considera que no necesita el visto bueno de Bruselas en materia de competencia -como sí requiere, por ejemplo, la fusión de Orange y MásMóvil y que todavía está pendiente de aprobación- para llevar a cabo la operación.
En cuanto al reglamento europeo sobre las subvenciones extranjeras que distorsionan el mercado interior (Reglamento (UE) 2022/2560), esta normativa señala que estas ayudas pueden "socavar la igualdad de condiciones de competencia en diversas actividades económicas" en la UE. "Esto puede suceder, en concreto, en el contexto de concentraciones que lleven aparejados cambios en el control de empresas de la Unión, cuando dichas concentraciones se financian total o parcialmente mediante subvenciones extranjeras, o cuando se adjudican contratos en la Unión a operadores económicos beneficiarios de subvenciones extranjeras", señala la normativa.
El reglamento europeo establece en su artículo 10 (apartado 4) que cuando, durante un examen preliminar de este tipo, la Comisión Europea llegue a la conclusión de que hay indicios insuficientes para iniciar una investigación exhaustiva -bien porque no exista subvención extranjera o porque no haya indicios de una distorsión efectiva o potencial en el mercado interior-, concluirá el examen preliminar e informará de ello a la empresa investigada y a los Estados miembros.
Así, Zegona ya ha sido informada, según la documentación a la que ha tenido acceso Europa Press, de que "no hay indicios suficientes" para realizar una investigación en profundidad en relación con este reglamento europeo, por lo que la Comisión Europea ha dado por finalizado su examen preliminar.
El comunicado en el que la CNMC anuncia la autorización de la operación recuerda que Zegona es una empresa que opera como vehículo de inversión en el sector europeo de la tecnología, los medios de comunicación y las telecomunicaciones y que ya en 2015 adquirió en España participaciones en Telecable de Asturias y, posteriormente, en 2017, en Euskaltel. No obstante, en 2021 el fondo británico vendió todas sus participaciones en España a MásMóvil.
"La adquirida, Vodafone, es una filial de Vodafone Group Plc, un operador multinacional de telecomunicaciones con actividad en 17 países, mayoritariamente en Europa y África. Vodafone ofrece en España servicios de telecomunicaciones móviles, fijas y servicios minoristas de televisión y tecnología a través de sus marcas Vodafone y Lowi", añade el regulador.