Renfe ha eliminado las indemnizaciones que hasta ahora ofrecía por retrasos de 15 y 30 minutos en los AVE, y a partir de julio solo indemnizará los retrasos de un mínimo de 60 minutos, limitándose así a cumplir con la normativa española.
Hasta ahora, Renfe destacaba entre todos los operadores por ofrecer un compromiso de puntualidad muy superior al mínimo exigido por la legislación, devolviendo el 50% del billete por un retraso superior a los 15 minutos y el 100% si el tren llegaba más de 30 minutos tarde.
Este empeoramiento del servicio se aplicará a partir del 1 de julio. Para recibir el 50% del precio del billete, la demora tendrá que ser igual o superior a 60 minutos, mientras que para recibir el 100% se tendrá que retrasar más de 90 minutos.
Renfe si permitirá indemnizaciones mayores si los usuarios aceptan recibir la compensación a través de sus puntos del programa de fidelización, que pasarán a llamarse 'Renfecitos'. En concreto, doblará las devoluciones recibidas a través de este sistema.
Asimismo, también ofrecerá una tercera posibilidad para las indemnizaciones que permitirá que sean un 50% superiores si los pasajeros aceptan percibirlas a través de un vale para futuros viajes.
Esto supone que también cambiarán las condiciones cuando se produzcan retrasos en un Alvia o un Euromed, ya que actualmente Renfe devuelve el 50% del importe del billete por retrasos de 30 minutos y el 100% cuando la demora es de una hora. También pasará a ser del 50% en retrasos de 60 minutos y del 100% en las demoras de más de 90 minutos.
En el caso de los Avlo y los Intercity no se producirán cambios puesto que Renfe ya aplica el mínimo legal establecido en la normativa española al igual que Ouigo e Iryo.
Esta nueva medida de reducir la indemnización, surge después de que el ministro de Transporte, Óscar Puente, atacara a las nuevas compañías, Iryo y Ouigo por poner precios muy bajos. Esta crítica a la competencia podría haber despertado el instinto competitivo del ministro con Renfe, pero ha optado por empeorar la calidad del servicio y perjudicar al consumidor.