Yolanda Díaz confía en que está cada vez más cerca de lograr su medida estrella de esta legislatura: la reducción de la jornada laboral con el mismo sueldo.
El plan de la fundadora de Sumar consiste en cambiar el artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores para que ya este año la ley impida trabajar más de 38,5 horas a la semana a todos los ciudadanos del país, por lo que los empresarios tendrán que asumir el coste de esa reducción forzosa de la jornada. En 2025, ese tope se reducirá a 37,5 horas en lugar de las 40 actuales. Así lo ha pactado con Pedro Sánchez.
Pero el año 2024 se acaba, y la ministra de Trabajo todavía no ha logrado su objetivo. Yolanda Díaz está esperando el visto bueno de la patronal, que no parece que vaya a aceptar. Sin embargo, ayer martes, la ministra que ironizaba sobre "abolir el trabajo" aseguró que aprobaría esta medida "de urgencia" una vez finalice "la mesa de negociación" con CEOE y sindicatos a la que todavía no ha puesto fecha de caducidad.
Mientras tanto, en pleno debate sobre si es tan urgente acabar con las maratonianas jornadas de los españoles, como afirma Yolanda Díaz, salen a la luz otros datos que revelan que la realidad es justo la contraria. Se trata de las cifras de absentismo laboral.
1,2 millones de personas no fue a trabajar
Esta semana, Adecco ha actualizado sus datos de absentismo laboral y los resultados son muy reveladores. Los autores del informe calculan que las horas no trabajadas por absentismo en el segundo trimestre del año equivalen a que 1.205.851 asalariados no hubieran acudido ningún día a su puesto de trabajo. El término absentismo incluye las "horas no trabajadas por motivos ocasionales", como las bajas por incapacidad temporal o las no justificadas.
Adecco llega a esta conclusión considerando que en el segundo trimestre de 2024 la jornada pactada fue de 454 horas/trabajador y hubo 30 horas de absentismo/persona. El dato de esos 1,2 millones de asalariados que no acudieron ningún día a su puesto de trabajo supuso una caída del 1,3% respecto al primer trimestre del año, pero se incrementó un 8,8% respecto al año pasado.
Otra variable analizar es la tasa de absentismo, que divide las horas no trabajadas por esos "motivos ocasionales" entre las horas pactadas efectivas, que son las horas pactadas más las horas extra menos las vacaciones.
Pues esa tasa también ha vuelto a crecer en el segundo trimestre de 2024 de manera interanual y ahora es del 6,9%. Se trata de una cifra que ha disminuido 0,4 puntos porcentuales con respecto al primer trimestre de 2024 pero ha aumentado 0,2 puntos porcentuales con respecto al mismo periodo del año anterior.
El debate de las "bajas flexibles"
Estas cifras también se conocen pocos días después de que la ministra de Seguridad Social, Elma Saiz, haya anunciado su intención de abrir una mesa de negociación con los agentes sociales para abordar un nuevo modelo de "baja flexible" que permita en algunos casos al empleado reincorporarse al trabajo de forma voluntaria al mismo tiempo que está de baja.
La propuesta de Saiz es muy razonable. Por ejemplo, permitiría a una persona que se ha hecho daño en una pierna seguir trabajando con su ordenador estando de baja. Sin embargo, el planteamiento de la socialista ha indignado a Yolanda Díaz y a Podemos, que rechazan el debate, por reducir "derechos de los trabajadores". Además, medidas como esta supondrían un impedimento al plan de estos partidos para trabajar menos.