La ministra de Hacienda y vicepresidenta del gobierno, María Jesús Montero, afirmó el pasado 18 de junio que el gobierno de Sánchez "ha llevado a cabo la mayor rebaja de impuestos de la historia". Esta afirmación choca frontalmente con los cálculos que acaba de presentar el Instituto Juan de Mariana (IJM) y que cifran el impacto neto de las medidas recaudatorias aprobadas por el Ejecutivo en más de 40.000 millones de euros.
Según el informe del IJM, titulado "Populismo fiscal", si se cuantifica el saldo neto de la gestión del gobierno de Pedro Sánchez entre 2019 y 2023, vemos que el efecto acumulado de sus decisiones en materia de impuestos y cotizaciones arroja un aumento de la recaudación de 41.725 millones. La siguiente tabla desglosa el impacto de las medidas adoptadas por el gobierno de PSOE y Sumar entre los años 2019 y 2023.
"El efecto neto que se deriva de todas las decisiones que ha tomado el gobierno de Pedro Sánchez ronda los 42.000 millones de ingresos "extra". Así, frente a medidas puntuales de rebaja fiscal por valor de 21.115 millones de euros, como las rebajas temporales del IVA o el Impuesto de Hidrocarburos adoptadas ante la crisis inflacionaria, se han introducido asimismo decenas de medidas orientadas a elevar los ingresos, todas ellas permanentes. Así, se han dado subidas de impuestos por valor de 9.625 millones, así como aumentos de las cotizaciones sociales por valor de 26.115 millones. Por otro lado, de los cálculos elaborados por el Banco de España se deduce un incremento recaudatorio de 27.100 millones derivado de la no deflactación de los impuestos – es decir, la negativa del gobierno a ajustar tipos, tramos y umbrales para tomar en cuenta el impacto de la inflación y el efecto de la llamada progresividad en frío", explica el informe del Instituto Juan de Mariana.
En total, "la cifra de 41.725 millones equivale a unos 2.200 euros por hogar. El gobierno se ha apoyado en al menos 81 medidas recaudatorias para generar más ingresos vía impuestos y cotizaciones. Año por año, se han dado 11 subidas en 2019, 12 en 2020, 20 en 2021, 10 en 2022, 17 en 2023 y 11 en lo que va de 2024. Si a eso le sumamos lo ocurrido con la inflación, convertida en un impuesto "en la sombra" por la no deflactación de los impuestos, encontramos que el saldo total ha sido muy perjudicial para los contribuyentes".
Entre las 81 medidas recaudatorias recopiladas por el IJM, destacan las siguientes líneas de aumento de los caudales públicos:
- "Desde la llegada del sanchismo al poder, en España se han creado nueve impuestos: la Tasa Google, la Tasa Tobin, el canon digital, el canon hidroeléctrico, el impuesto a los plásticos de un solo uso, el nuevo gravamen aplicado a los residuos, el impuesto a las grandes fortunas, el impuesto a las entidades financieras y el impuesto a las compañías energéticas.
- Asimismo, el gobierno ha desarrollado dieciocho subidas en impuestos ya existentes, incluyendo seis aumentos del IRPF, cuatro del Impuesto de Sociedades, dos del Impuesto de Hidrocarburos y una del Impuesto sobre el Patrimonio, así como la revisión al alza del IVA de las bebidas azucaradas, el impuesto repercutido sobre las primas de seguros, la fiscalidad de las SOCIMI, la tasa de matriculación y el gravamen de gases fluorados.
- Por otro lado, se han aprobado hasta treinta y cinco modificaciones del valor catastral que han resultado en el aumento de los impuestos de referencia, que en este caso serían el Impuesto de Bienes Inmuebles, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, el Impuesto de Sucesiones, el Impuesto de Donaciones, el Impuesto sobre el Patrimonio y la Plusvalía Municipal.
- En paralelo, se han decretado 19 subidas de las cotizaciones sociales, tanto generales como de autónomos, entre ellos el polémico recargo que el gobierno ha presentado como una "cuota de solidaridad" aplicable desde el próximo ejercicio 2025.
- Por último, y por añadidura a todo lo anterior, el Ejecutivo no ha ajustado los tramos y umbrales de referencia de los impuestos a pesar de que su periplo ha coincidido con una inflación acumulada del 18,5 por ciento que ha propiciado 27.100 millones de euros de ingresos adicionales".
España, el tercer país de la UE que más ha aumentado la presión fiscal
En total, "el efecto de los incrementos recaudatorios observados asciende a 62.840 millones de euros, mientras que las medidas temporales que redujeron algunos impuestos a la baja de forma puntual tuvieron un impacto de apenas 21.115 millones. Por tanto, por cada 1 euro de rebaja se han adoptado 3 euros de incremento, con el agravante de que las rebajas fueron temporales, como vimos con el IVA de los alimentos o la bonificación del Impuesto de Hidrocarburos, mientras que las subidas adoptadas tienen efectos permanentes".
Como vemos en el siguiente gráfico, "desde el año en que Pedro Sánchez llegó al gobierno hasta el pasado ejercicio, el ratio de presión fiscal, que relaciona lo recaudado con el PIB, ha crecido en 2,9 puntos porcentuales, solamente por debajo de los aumentos que se han dado en Eslovaquia y Chipre. Sin embargo, en la Eurozona se ha apreciado una caída promedio de la presión fiscal de 0,7 puntos del PIB, mientras que en el conjunto de la Unión Europea arroja un descenso medio de 0,8 puntos".
"Alemania, Países Bajos, Grecia, Dinamarca, Bélgica, Francia o Suecia son solamente algunos de los países que han reducido su presión fiscal de forma significativa a lo largo del periodo analizado. Frente a la voracidad recaudatoria con la que ha actuado el gobierno español, vemos que 12 de los 27 miembros de la UE han optado por reducir la presión fiscal para brindar alivio a empresas y familias. Los operadores privados se vieron golpeados primero por la pandemia y después por la crisis inflacionaria, de modo que llama la atención que España haya roto con la tendencia observada en buena parte de Europa y se haya situado como uno de los países que más fuertemente eleva su presión fiscal", destaca el IJM.
El estallido en materia de impuestos y cotizaciones ha sido tal que, "si agregamos la recaudación tributaria alcanzada de enero a septiembre de 2024, encontramos que los caudales públicos generados en los nueve primeros meses del año superan la totalidad de lo recaudado en todo el ejercicio de 2018, cuando Pedro Sánchez llegó al poder".
Así las cosas, el Instituto Juan de Mariana considera que, "tanto las 81 subidas de impuestos y cotizaciones como la no deflactación del sistema tributario han sido decisiones del gobierno de Sánchez orientadas a expandir los ingresos públicos y, por el camino, profundizar un modelo económico más intervencionista. No tiene sentido, pues, plantear que hasta la fecha se han venido bajando los impuestos, ya que la evidencia sugiere una política muy expansiva que, en efecto, ha disparado la recaudación".
De hecho, las subidas aprobadas han sido tan excesivas que, según un análisis de eficiencia del IRPF elaborado recientemente por el propio IJM, "España podría reducir los tramos de dicho gravamen en torno a un 25 por ciento sin que ello merme la recaudación a medio plazo, puesto que los tipos actuales están en la zona prohibitiva de la Curva de Laffer y, si bien generan aumentos recaudatorios en términos absolutos, lo hacen en menor medida de lo que veríamos si la economía estuviese sujeta a una presión fiscal más baja".