
El Gobierno ha hecho una exhibición de fuerza en Telefónica. Este viernes por la tarde, a última hora y mientras despachaba algunos asuntos, el hasta ese momento presidente de la primera teleco española, José María Álvarez-Pallete, recibía una llamada que le urgía a desplazarse al palacio de la Moncloa.
Fuentes consultadas por LM, señalan que Pallete no tenía dudas de lo que le iba a suceder, que le llamaban para destituirle como presidente de Telefónica, pero no era el momento, no tocaba. Sólo unos meses después, para la primavera, estaba previsto que se celebrase el Consejo que tendría que destituirle.
Ya en la Moncloa, agradecen sus servicios y le comunican su cesión como presidente. Sería destituido por Marc Murtra, hasta ese momento, presidente de Indra.
Es decir, que en España es ya el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien quita y pone presidentes en las empresas del Ibex 35. Ángel Escribano, de Mecanizados Escribano, sería el elegido para presidir Indra, tras la salida de Murtra.
Ya en el pasado mes de julio, Sánchez en sede parlamentaria, dijo con tono de gravedad que los "ortodoxos liberales" se equivocaban cuando decían que los gobiernos, los poderes públicos, debían estar al margen de las reglas de mercado. Pues bien, ha cumplido lo dicho: "Keynes está más vivo que nunca", proclamó Sánchez. Y está siguiendo su propia doctrina.
El mercado fue implacable: La cotización de Telefónica caía casi un 3% este lunes tras el asalto del Gobierno.
Sánchez utilizó la entrada de la saudí STC en septiembre de 2023 como excusa para que la SEPI se hiciera con el 10% de la operadora, renacionalizando la empresa de la que había salido en tiempos de Aznar, en el proceso de privatización de las empresas públicas heredadas del franquismo.
En aquellos momentos, Calviño dijo que se trataba de la empresa más estratégica e España. Y el Gobierno pidió a empresas como BBVA y Criteria Caixa un esfuerzo para igualar el peso de los saudíes en la compañía. Acudió Criteria Caixa en su ayuda con un 9,99% de las acciones. A finales de ese año 2023, decidió volver al accionariado de Telefónica y ordenó a la SEPI – Y hizo su primera compra de un 3% el 26 de marzo de 2024. Tras diversos paquetes de compras en apenas dos meses, el 20 de mayo el Gobierno ya controlaba un 10% de Telefónica.
Desde que tomó el poder en 2018, Sánchez no ha parado de acumular poder y colonizar instituciones. También quiere hacerlo con las empresas. La única pregunta es, ¿cuál será la próxima?