Los últimos informes de recaudación de la Agencia Tributaria han dado más datos del saqueo fiscal realizado por Pedro Sánchez. Ya sabíamos que el cómputo de subidas de impuestos más cotizaciones sociales rebasó ese año loa 140.000 millones de euros desde el inicio del mandato de Pedro Sánchez. Pero ahora sabemos otros detalles como que, sobre el poco ahorro que lograron acumular los contribuyentes españoles, Pedro Sánchez, fruto de sus cambios legales consiguió confiscar otros 222 millones de euros.
El año 2024 fue un nuevo festín recaudatorio para Pedro Sánchez. Sus atracos fiscales han sido habituales desde su llegada en 2018. Pero lo cierto es que Hacienda en 2024 alcanzó un nuevo récord de ingresos. Sociedades, IVA, Impuestos Especiales... todas las figuras tributarias se dispararon y Hacienda recaudó más por todos los tributos. Eso sí, la estrella en el saqueo fiscal fue el impuesto que más castiga al empleo: el IRPF.
En total, la Agencia Tributaria se embolsó por el IRPF más de 129.000 millones de euros el pasado año, todo un hito histórico de María Jesús Montero. Otro dato llamativo es que 2024 fue el año con el tipo medio del IRPF más alto de la historia. Así, mientras que en 2019 (primer ejercicio completo de Sánchez en el Gobierno tras su moción de censura de mayo-junio de 2018) el tipo medio era del 12,9%, el año 2024 acabó en el 14,4%.
En 2024, solo el IRPF aportó el 43,9% de los ingresos impositivos totales de la Agencia Tributaria. En segundo lugar está el IVA, que aportó el 30,7%%, y en tercer lugar, Sociedades, que aportó el 13,3%. Los impuestos especiales, donde se encuentran el tabaco o el alcohol, supusieron el 7,5% de los ingresos.
Aumento fiscal récord bajo Sánchez
Y los acumulados son aún más escandalosos. Porque el IRPF y las cotizaciones sociales han disparado su recaudación desde la llegada de Sánchez en más de un 40%. En el caso del IRPF, se ha disparado directamente un 56,2% con un aumento en el cobro fiscal de la Renta de 46.549 millones. En el de las cotizaciones sociales, la escalada ha sido de un 43,5% sumando más de 50.000 millones adicionales.
Pero, al margen de todo ello, llaman la atención algunos de los datos de cierre del año. Así, en un ejercicio en el que la población no pudo incrementar su poder adquisitivo, Sánchez decidió arañar impuestos hasta de los pocos ahorros que se cosecharon. Así los últimos informes de la Agencia Tributaria relatan que la "subida del tipo sobre la base del ahorro en el IRPF" supuso una recaudación extra de 222 millones de euros.
Es más, si algunos contribuyentes decidieron elevar sus ingresos con pequeños trabajos para intentar evitar el golpe de la inflación, pues también con "las medidas relacionadas con los rendimientos de las actividades económicas" Sánchez logró rebañar otros 122 millones.
Otra partida más delatora del ansia fiscal inacabable de este Gobierno: el cambio regulado por el Gobierno en los sistemas de aplazamiento de pagos fiscales –los que piden las personas o empresas que no pueden hacer frente a los pagos debidos a Hacienda– permitió a la Hacienda de María Jesús Montero quedarse con 33 millones de euros más.
Todo un suma y sigue que ha convertido ya al legado de Sánchez en el más saqueador de la historia democrática fiscal española.
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