Se celebra en Madrid el décimo Congreso de la Fundación Mujer, Familia y Trabajo bajo el título Avanzando hacia un liderazgo más humano. Aunque pueda parecer que referirse a conciliación es referirse a un término obsoleto, lo cierto es que la conciliación laboral y familiar es todavía un objetivo a cumplir en España.
Desde la Fundación Mujer, Familia y Trabajo lo tienen claro, y por eso celebra su décimo cumpleaños con un congreso, los días 7 y 8 de junio, en el que profesionales del mundo empresarial y representantes de las diferentes administraciones públicas pondrán sobre la mesa las claves para que el mercado laboral español se adapte a los nuevos modelos de trabajo que demandan tanto mujeres como hombres.
La constitución de la mesa del nuevo Parlamento Autonómico imipidió a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y a la consejera de Empleo y Mujer, Paloma Adrados, inaugurar el acto como han venido haciendo en numerosas ocasiones.
En su lugar, fue la directora general de la Mujer en la Consejería de Empleo de la Comunidad de Madrid, María José Pérez-Cejuela, la encargada de brindar su apoyo a esta institución en la inauguración de su primera jornada, acompañada por la directora general de Familia de la Comunidad de Madrid, Blanca de la Cierva, y la presidenta de la Fundación Rafael del Pino, María del Pino.
La presidenta de la Fundación, Gloria Fuste, aseguró que aún existe un problema de conciliación entre el desarrollo profesional y familiar de los individuos. Para solucionarlo es necesario un compromiso real entre todos los agentes del mercado laboral, que parta desde la igualdad de oportunidades y que consiga llegar hasta un liderazgo empresarial más humano. También reconoció que, aunque queda un largo camino por recorrer en la igualdad de mujeres y hombres, "ya hemos dado un paso adelante y sin retorno".
"No hay que vociferar ningún tipo de cupo o subvención que no es más que un detector de cierta inseguridad en las capacidades", exigió María del Pino. "No puedes poner a una mujer en un puesto por capricho, hay que demostrar que realmente lo vale", declaró.
Por su parte, María José Pérez-Cejuela explicó cómo la productividad y el crecimiento económico están ligados a estos ámbitos. "La capacidad de adaptación y flexibilización son un valor añadido para las empresas que les permitirá retener el talento de sus profesionales".
Todos los ponentes de esta primera jornada apuntaron al norte de Europa como la demostración empírica de que la conciliación laboral ligada a una mayor flexibilización de horarios es un claro ejemplo de productividad empresarial. Para ello, sería necesario suprimir en España la "cultura de la presencia en el puesto de trabajo".
Pero no es sólo el modelo de trabajo actual es un problema para la igualdad laboral entre hombres y mujeres. Para Javier Luis de Azcárate, co-autor del libro Modelos innovadores para la gestión de RRHH, el origen del conflicto está en la familia: "Si tus hijos te ven actuar de una forma, actuarán igual", y por eso es imprescindible forjar desde el entorno familiar los nuevos valores de las relaciones laborales, indicó.