El consejero de Economía y Conocimiento Andreu Mas-Colell ha sugerido este lunes que el 20% de los beneficios que se obtengan de la privatización del aeropuerto de El Prat se destinen a suprimir deuda catalana. Durante la presentación de la Memoria Económica de Cataluña del 2010, ha señalado esta cifra como lógica, aunque ha rechazado fijar una cantidad de forma definitiva.
No obstante, ha defendido que los beneficios de la operación se repartan entre el Estado y Cataluña, ya que esta infraestructura "refleja la vitalidad de la economía catalana".
Asimismo, el consejero ha reclamado a los diseñadores del plan de privatización un compromiso escrito que asegure que El Prat y Barajas "no acabarán en las mismas manos".
Ha negado que su actitud responda a algún temor concreto y ha justificado su desconfianza argumentando que es un buen ejercicio "pensar que puede pasar lo peor que pueda pasar".
Mas-Colell también se ha referido a los presupuestos "austeros, creíbles y responsables" que el Parlamento aprobará esta semana y ha deseado que sirvan de antesala para los del 2012. En este sentido, ha emplazado a darse cuenta de que conviene pasar el 2012 con unas finanzas restrictivas pero con un "soporte amplio".
Cataluña crece, pero sin crear empleo
La memoria presentada por el Consejo General de Cámaras de Cataluña sobre la economía catalana en el 2010 prevé que la economía catalana crezca en torno a un 1% en 2011, una cifra que "mantiene la tendencia positiva pero es insuficiente para crear empleo", según el presidente de la institución, Miquel Valls.
Valls ha destacado que esta mejora se sustenta en las exportaciones y el turismo, pero ha subrayado la importancia de reactivar la demanda interna para acelerar la recuperación.
También ha reclamado una reforma de la formación profesional en pro del conocimiento útil y un marco legal más simple para facilitar la conversión de micro pyme en pyme, así como medidas fiscales para favorecer el acceso de los empresarios al crédito.