El consejero de Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Mario Garcés, ha anunciado que el déficit de la comunidad en todo 2011 será del 2,6%, equivalente a 929,5 millones de euros, por lo que duplicará el objetivo oficial de estabilidad presupuestaria acordado por el Consejo de Política Fiscal y Financiera, que lo marcaba en un 1,3%.
Durante su comparecencia ante las Cortes de Aragón, Garcés señaló que esta situación proviene de la "caída estrepitosa" de la forma de hacer la política económica, y de unas medidas de contención del gasto "insuficientes".
Garcés ha ejemplificado el origen de la situación con el déficit en materia de salud que se calcula ronde los 400 millones de euros para finales de este año, aunque ha reconocido que el gasto final se situará en torno a los 5.1000 millones de euros lo que, según el gobierno autonómico, si se tiene en cuenta el nivel de avance de la ejecución presupuestaria, los gastos público obligatorios "no se pueden ajustar", dejando un margen de acción "muy reducido" al Estado. "Lamentablemente no se puede echar marcha atrás, pero es necesario reorientar una situación insostenible e inviable a medio plazo", añadió.
El consejero detalló a sus señorías que a fecha de 15 de julio de 2011 se han imputado al presupuesto de este año obligaciones precedentes por importe de 229 millones de euros, de los cuales 214 provienen de obligaciones generadas en el Sistema de Salud. Por lo que marcó la importancia de la adopción de medidas de racionalización del gasto público sanitario para reducir la "brecha" entre los presupuestos sanitarios y los gastos reales de los próximos ejercicios.
Por otro lado, en materia de ingresos el titular del Departamento de Hacienda y Administración pública destacó el inconveniente del "insuficiente" modelo de financiación autonómica y de la gestión del sistema por parte del Ministerio que "no ha librado de anticipos derivados del fondo de Convergencia y de los recursos adicionales del nuevo sistema de financiación".
Asimismo, Garcés lamentó que el saldo vivo de la deuda de la comunidad aragonesa se haya triplicado en los últimos cinco años, pasando de 1.165 a 3.300 millones de euros, lo que en su opinión hace que cada familia aragonesa adeude 10.000 euros frente a los 3.000 de 2007.
En este sentido, el consejero indicó que "la deuda pública es un tributo diferido que van a pagar nuestros hijos y nietos y va a crecer si las previsiones de ingresos fiscales siguen hasta ahora, por lo que es fundamental adoptar medidas de política económica que relancen las economías española y aragonesa".
Además del análisis sobre la situación de déficit en Aragón, Garcés subrayó que hay políticas de gasto que "deben consolidarse" como las de sanidad, educación, justicia o servicios sociales.
Medidas
El consejero de Hacienda anunció también que el Gobierno presidido por Luisa Fernanda Rudi presentará durante los próximos meses una ley de Estabilidad Presupuestaria que incluirá la obligación de fijar un techo de gasto e incluirá la novedad de un fondo de reserva para la prestación de servicios sanitarios y sociales que se nutrirá de excedentes cuando haya superávit presupuestario.
Otras medidas serán la supresión de las "ayudas inespecíficas" del anterior Ejecutivo y la obligación a todas las Administraciones públicas receptoras de subvenciones a tomar medidas de contención del gasto.
Asimismo, en los próximos meses se pondrá en marcha una estrategia de racionalización del patrimonio inmobiliario de la Comunidad para poder ponerlo en el mercado de adquisición, y se procederá a suprimir la tasa de provisionalidad para la Diputación General de Aragón.
Por último, el consejero recalcó ante los diputados autonómicos su voluntad de "intensificar los trabajos de inspección tributaria para combatir el fraude de los tributos gestionados en Aragón" y la derogación en 2012 del impuesto de tendidos aéreos y la reducción del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.