"El modelo de financiación autonómica fue un modelo impuesto en una negociación impresentable del señor Rodríguez Zapatero, por detrás, con el Tripartito. Se impuso al día siguiente del Consejo de Política Fiscal y Financiera y al que no firmaba formalmente no se le daba dinero conforme al modelo, se le penalizaba sin modelo. La extorsión del Partido Socialista para que todos los que no estaban de acuerdo pudieran recibir ese dinero."
Así contestaba este jueves el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, al líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, cuando éste le reprochaba que el PP se queja ahora de un modelo de financiación que firmó en su día con el Gobierno socialista de Zapatero.
El caso es que ese modelo es el que hoy establece el "trozo de la tarta" que corresponde a cada Comunidad Autónoma y de la que se queja amargamente la Comunidad de Madrid. Tanto es así que, incluso, la Consejería de Hacienda de Madrid ha descubierto también fallos en el cálculo de su financiación y no ha dudado en remitir una carta dirigida a Cristóbal Montoro en la que le reclama 1.000 millones de euros y se manifiesta en contra de un modelo que considera "injusto y absurdo".
En una misiva de 18 páginas fechada en Madrid el 11 de octubre pasado, el consejero de Economía y Hacienda le dice a Montoro que "hemos advertido la existencia de un error en los datos facilitados correspondientes a los ingresos comunicados a Madrid". Un error que "hace que la Comunidad de Madrid deje de recibir 1.000 millones de euros en concepto de distintos tributos y mecanismos en los que participa en dicho sistema de financiación". Además, se pregunta: "¿Cómo se puede explicar que si Madrid, año a año, se comporta mejor que el resto de España, comparativamente hablando, pueda empeorar su liquidación de 2011 frente a la de 2010, al pasar a 330 millones desde 1.272 millones? Si Madrid creció 7 décimas más que España en 2009, 8 décimas más que España en 2010 y un punto más que España en 2011, es decir, cada año aumentaba su diferencial positivo de crecimiento".
Algunos medios, como El País, consideran esta carta la prueba de que "Ignacio González se pone a la cabeza de los barones críticos al PP" y "ataca la 'discriminación' que sufre frente a Andalucía y Cataluña".
En la carta, el recién nombrado consejero de Hacienda madrileño, Enrique Ossorio, dice que "sí, podemos concluir que no sólo dicho sistema de financiación es injusto, incoherente y conduce al absurdo, sino que, además, contiene errores en indicadores fundamentales...".
Además, no elude el dato comparativo: "Mientras que Madrid ve disminuir sus entregas a cuenta un 1,15% entre 2012 y 2013 (...) donde Cataluña sólo desciende un 0,28% y Andalucía ve incrementar sus entregas a cuenta un 1,24% cuando la evolución económica de ambas regiones es peor".
Finalmente, Ossorio concluye : "Que el sistema de financiación perjudica a la Comunidad de Madrid es un hecho objetivo...".