Alberto Recarte ha vuelto este jueves a su cita semanal con los seguidores de Es la Noche de César. El economista y consejero de Libertad Digital ha respondido a las dudas sobre la situación económica que le han planteado los oyentes de esRadio.
- En los últimos días hemos escuchado muchas críticas sobre las tasas judiciales, ¿cuál es su opinión?
- Soy favorable a las tasas. Nadie está explicando por qué el Gobierno se echa encima a los jueces, abogados, fiscales... En realidad, es introducir el copago. No va a cubrir ni el 1% de los costes judiciales. Sirve sólo para evitar que se litigue por litigar. Para empezar, no se va a introducir el copago en temas penales ni en temas que afecten a libertades fundamentales, sino en temas que tienen que ver con lo civil y con lo contencioso administrativo. ¿Por qué es importante el copago? Por ejemplo, en lo de las multas, si para recurrir una multa de 100 euros hay que pagar 200 euros, pues eso es un error. Pero en conjunto, está muy bien pensado. ¿Por qué el retraso de la justicia? Porque todo el mundo litiga. Porque incluso aunque uno no tenga razón, uno sabe que puede retrasar una decisión contraria a sus intereses económicos un año, tres años, cinco años... Hay abogados que te lo garantizan. Un retraso de 3-5-10 años a coste cero. Eso interesa a las personas que litigan. A los profesionales de esto, que son los abogados, jueces y fiscales, también les interesa que se litigue. Esto produce que la justicia no sea justicia por los tiempos que se tardan. No me extrañaría que esto supusiera que un 30 o 40% de los casos no se presentaran simplemente por no pagar una tasa. ¿Y qué es lo que provocaría de positivo? Habría la mitad de las demandas y la justicia española podría ponerse al día en dos o tres años. Como siempre, algo que es gratis y no tiene responsabilidad, se convierte en abuso. La ley también contempla exenciones para los casos de pocos ingresos económicos. Pero hay que mirar con cuidado el barullo que se está formando en el mundo judicial: hay razones económicas e intereses profesionales de fondo que explican el por qué se imponen las tasas y por qué ese conjunto de interesados no quieren que se imponga.
- ¿Qué opina de la medida del Gobierno de otorgar la residencia por la compra de vivienda?
- Es un tema normal en otros países desde hace muchos años. Se otorga la residencia no por compra de vivienda, sino por invertir en el país. No es algo extraño. Sí lo es el ligarlo a la compra de viviendas. Me parece bien porque aquí se instala el que le da la gana, con o sin permiso. Así por lo menos lo legalizamos y les vendemos algo. Estoy esperando a ver qué dicen en el resto de la UE. Es positivo y yo lo apoyo, porque estamos donde estamos.
- ¿Cree que muchos extranjeros querrán comprar viviendas en España a raíz de la propuesta del Gobierno?
- Subir no. No hay tantos. Ha habido momentos en los que se vendían entre 20.000 y 30.000 viviendas al año a extranjeros. Ahora es cuando se está empezando a reactivar. El Gobierno está bienintencionado, pero sigue al mercado, que ya se había puesto en marcha, por el descenso de precios y por una cierta seguridad que está dando España. Si vuelven a comprar entre 20.000 y 30.000 viviendas, sería muy interesante.
- ¿Corre peligro el abastecimiento de medicamentos a las farmacias por el impago de las autonomías?
- Hay autonomías en las que ni siquiera con el plan de pago a proveedores se han puesto al día. No entiendo por qué los laboratorios siguen suministrando medicamentos si no les pagaban. ¿Por qué lo han hecho? Porque estaban convencidos de que al final les iban a pagar y porque los precios ya llevaban un recargo suficiente para compensar. Tan responsables son las autonomías como los propios laboratorios que han entrado en ese juego. Desabastecimiento no lo habrá porque no creo que la situación sea tan dramática como el año pasado. Pero a las farmacias de ciertas autonomías se les está poniendo en una situación insostenible, porque no se les pagan los medicamentos y están teniendo que financiar el 50 o el 60% de las ventas anuales. Y además las entidades financieras no están dando crédito en este año. Efectivamente, es un lío, pero no creo que corra riesgo el suministro de medicamentos.
- ¿Tiene razón The Economíst cuando dice que Francia es la bomba de relojería de la Eurozona?
- Totalmente de acuerdo. Desde la constitución de la unión monetaria, el problema a largo plazo (al margen de países como Italia, Grecia o España) era si se podía mantener una unión monetaria cuyo eje es la unión indisoluble en la moneda entre Francia y Alemania. Porque Alemania ha seguido haciendo reformas y ganando productividad desde la creación del euro. Francia no ha hecho ninguna. Cada vez que se plantea una reforma en el sector público, los empleados que son más del 30% de los ocupados se oponen y lo paran. Francia es un auténtico riesgo. El euro tiene un futuro muy complicado, con Francia dentro es imposible mantener la unión monetaria. Hoy por hoy no veo a ningún político francés dispuesto a hacer la transformación económica que España está haciendo. ¿A qué se parece más? A Cataluña: intervencionismo, mucha más corrupción de lo que parece, no competencia, proteccionismo, no internacionalización... Eso a Cataluña le está llevando a una situación muy complicada. Francia es lo mismo llevado al extremo.